Aunque es originaria de Tampico, es común que quien viaje a diversas ciudades de Texas, en Estados Unidos, puedan encontrar alguna variante de la torta de la barda y otras, aunque muy pocas, no le piden nada a las del puerto y hasta el escuis de hierro te ofrecen para pasarte cada bocado.
Chema y Adán son un par de tampiqueños que hicieron un viaje a Texas para salir de la rutina, así que el andar en el norte de Houston se encontraron con un establecimiento que era un explícito recordatorio de su ciudad, basta con leer el nombre, “Tacos y Tortas Tampico”.
El nombre del negocio está en la parte alta de una “food truck”, la cual por un lado tiene la imagen de una palmera playera y por el otro una jaiba caricaturizada, como cualquier establecimiento de este tradicional alimento instalado en el sur de Tamaulipas.
“La primera sorpresa fue el pan, estaba hecha la torta con pan francés (como le dicen en Tampico), en vez del pan con el que hacen las tortas aquí en Texas, que te dicen que es una torta en un pan como para hot dogs, así que no es lo mismo”, explicó Adán.
Con la curiosidad que ameritaba el momento, pidieron dos tortas para comer en ese momento y lo primero que hicieron fue ver los ingredientes.
“El sabor era bueno, porque había dos ingredientes que cambian un poco en comparación con las de Tampico, que es el queso mucho más reseco y los frijoles, que en vez de frijoles negros refritos, son bayos refritos; el chicharrón, no es como el de concha tradicional, pero sabe muy bien la salsa”, aseguró el tampiqueño.
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Adán aseguró que en Texas, en donde abundan los restaurantes de comida mexicana y latina, así como las réplicas de tortas de la barda, es la torta más parecida a la original, a la que diariamente se venden cientos o tal vez miles en la conurbación del sur de Tamaulipas.
Pero su sorpresa fue más grande cuando se enteraron que la persona que prepara la torta de la barda más parecida a la original no es de origen mexicano y tampoco texano, sino que es nacida en Honduras.
“Era una catracha quien la preparó, el pan era normal, del original, porque acá se usa como pan para hot dogs para hacer la torta y la verdad no está bueno; en otros negocios, me he encontrado que les ponen tocino y no sabe bien”, aseguró el tampiqueño.
Reconocen que en algunos puntos de Texas no hay cinco, tampoco diez los negocios que buscan igualar el sabor de la torta de la barda, pero son más, se encuentran en diversos lados de la ciudad.
"Pero lo mejor de la sorpresa gastronómica fue poder degustar su torta “con un escuis de hierro, es el clavo, en todos lugares en donde venden tortas de la barda hay escuis de hierro”.