Luego de que el pasado 30 de septiembre de 2019, el Juzgado 19 de lo familiar declarara al DIF de la Ciudad de México como heredero único y universal de los bienes de Marie-Jose Tramini, viuda de Octavio Paz, la dependencia capitalina ya protestó como albacea de la sucesión de bienes.
“Esto significa que pasa a los bienes del gobierno de Ciudad de México, administrados a través de la beneficencia pública, pero con un compromiso muy claro: al tratarse de la masa hereditaria del Premio Nobel, tendremos todo el cuidado para que no exista una dispersión de esos bienes y todo lo que se pueda programar sea de común acuerdo entre el gobierno federal, el de la ciudad y quien es el albacea”, aseguró el secretario de Cultura de Ciudad de México, José Alfonso Suárez del Real.
Entrevistado en el marco del homenaje a José José, en la Alameda Central, el funcionario capitalino enfatizó que todo aquello relacionado con Octavio Paz debe ser considerado patrimonio del pueblo de México, y al desaparecer la incertidumbre sobre el juicio sucesorio, ya se “puede empezar a vislumbrar que genera el aglutinamiento financiero, administrativo y operativo de todos estos bienes patrimoniales”.
“En el testamento de Octavio Paz queda perfectamente claro, y eso lo vamos a respetar, que los papeles van a quedar en El Colegio Nacional, pero no como propietarios o dueños, sino bajo su resguardo. Lo vamos a hacer honrando la voluntad explícita del poeta, quien consideraba que sus compañeros en esa institución sabrían qué hacer con esos papeles”.
Suárez del Real recordó que entre los bienes hay obras de arte, inmuebles y derechos de autor, los cuales deberán pasar al pueblo de México, a través de los mecanismos que se estipulen de común acuerdo entre Federación y gobierno de la ciudad.
Y ADEMÁS
PRESERVACIÓN EN CONJUNTO
La Secretaría de Cultura Federal, la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad de México y el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia de la Ciudad de México conformaron un grupo de trabajo y seguirán colaborando con el objetivo de conservar, preservar y clasificar la masa hereditaria, considerando en todo momento la no dispersión de los bienes que son del pueblo mexicano, “considerando la relevancia histórica y cultural que tiene Octavio Paz para el pueblo de México”.