Por primera vez en la historia del Premio Herralde de Novela, dos escritoras de distintas generaciones resultaron ganadoras: Cynthia Rimsky (Chile, 1962) por Clara y confusa, y Xita Rubert (España, 1996) con Los hechos de Key Biscayne, libros que serán publicados por Anagrama.
“Para mí el premio fue una gran sorpresa, realmente la mandé sin ninguna expectativa. Soy escritora hace muchísimos años, tengo muchos libros y ha sido un camino de ir encontrando mi voz, mi estilo, mi tono. Últimamente he trabajado mucho más en el humor y el premio implica, me encuentra, con la seguridad en lo que estoy escribiendo. con un proyecto que espero llegue a un público más amplio”, dijo Cynthia Rimsky a MILENIO.
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Sobre su novela, Clara y confusa la escritora comentó: “Es una novela que en realidad es una pregunta que se hace un plomero que conoce a una artista visual y se enamora de ella. Toda la novela es la aventura por tratar de encontrar una respuesta a la pregunta sobre si el otro te ama. Quería averiguar qué pasa cuando una persona empieza a dudar de todo y quise trabajar el claroscuro entre la confusión y la claridad de la vida”.
Alentada a seguir
Xita Rubert también se mostró sorprendida: “Es mi segunda novela y siento que me alienta a continuar escribiendo libros que vayan en un poco en la vía de lo que hice con mi primera novela, que es retratar conjuntos de personas, a veces de una familia, de un barrio, de una sociedad y ver qué hay detrás de lo que ellos dicen sobre sí mismos”.
En Los hechos de Key Biscayne se narra el amor de una hija por un padre, un hombre culto, y una historia en Miami que esconde la oscuridad de una violencia, dulce y terrorífica, que han experimentado todas las mujeres.
“Todo sucede en una isla en el sur de Florida y las cosas progresivamente empiezan a irse al garete, es el inicio de todo”, agregó la joven autora.
Obras divertidísimas
“Yo quería resaltar la excentricidad de las dos novelas premiadas este año, excentricidad en muchos sentidos. Los hechos de Key Biscayne es una novela barcelonesa que transcurre en Florida, mientras que Clara y confusa es una novela latinoamericana que no sabemos bien si transcurre en Chile o en Argentina, pero no transcurre en las grandes ciudades y, entonces, ambas novelas están, digamos, por fuera de los cánones y por fuera de los centros urbanos o con prestigio literario, y en ese sentido ya empezamos a hablar de lo que está por fuera del centro, de lo excéntrico”, dijo Juan Pablo Villalobos en conferencia de prensa virtual.
El escritor mexicano, la editora Silvia Sesé, Aldo García (de la librería Antonio Machado), el editor y crítico Gonzalo Pontón Gijón y la escritora Marta Sanz formaron parte del jurado de la edición 42 del galardón, dotado con 25 mil euros (aproximadamente 547 mil pesos).
“Yo celebro estas dos novelas divertidísimas, muy rompedoras en el sentido de su excentricidad. Creo que muestran muy bien cómo el premio Herralde apuesta siempre por el riesgo, por salir de la obviedad, de aquello que en principio parece que está destinado a triunfar y a hacer tendencia. Creo que son dos novelas que abren caminos de cómo se puede escribir en el futuro”, agregó Villalobos.
Fiesta suspendida ante la tragedia
Silvia Sesé, directora editorial de Anagrama, anunció: “Las novelas llegarán a librerías el 27 de noviembre y doy aviso de que la tradicional fiesta del Premio Herralde de Novela se va a aplazar. La haremos en otro momento más propicio, los ánimos no están demasiado para esta fiesta”. Esto tras la tragedia que vive España con las inundaciones en Valencia que han provocado cientos de muertos.