Después de dos ciclos de haberse quedado en la orilla, finalmente Briseida Acosta competirá en sus primeros Juegos Olímpicos;la taekwondoín llegará al evento con buenas cartas de presentación, luego de que en más de 10 años de carrera deportiva cuenta con un bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Nanjing 2010, un oro en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 y dos medallas en Campeonato Mundial (plata en Puebla 2013 y bronce en Manchester 2019).
Briseida, quien tiene 27 años de edad, competirá en Tokio 2020 en la categoría de más de 67 kilogramos y llegará al evento dentro del top ten mundial, por lo tanto, es una posibilidad para que el taekwondo mexicano siga manteniéndose en el podio olímpico desde que entró al programa oficial en Sídney 2000.
Para conseguir este sueño olímpico, la sinaloense tuvo que quitarse del camino en varias ocasiones a la triple medallista olímpica, María Espinoza. Briseida venció a María en la evaluación para Lima 2019, en el control para el Preolímpico de Costa Rica y en la evaluación final para definir a la representante olímpica.
¿Cuál es tu sentir de que finalmente lograste el sueño de clasificar a unos Juegos Olímpicos después de varios años de estarlo intentando?
El sueño que tenía siempre desde que practico taekwondo es poder representar a México en unos Juegos Olímpicos de adultos, creo que no es la cereza en el pastel, sino que un punto más en el camino, ya que he estado en Centroamericanos, Panamericanos, di la plaza para México y solo era cuestión de firmarla y poder estar en Tokio.
¿Qué representa para ti ser deportista olímpica en tu tercer intento?
Es una felicidad muy grande, pero también es una responsabilidad que debo asumir y tengo que trabajar para representar dignamente a mi país.
¿Cuál es tu expectativa en Tokio 2020?
Creo que tengo la posibilidad de dar un buen resultado, y yo lo he dicho, y lo seguiré diciendo, yo sueño, me levanto y pienso en que el Himno Mexicano suene en Tokio. Quiero traerle una alegría muy grande a México y tengo la capacidad para hacerlo, y ya lo he demostrado. De mí pueden esperar que el alma y el corazón se quedarán en el área.
¿Sientes alguna presión por el hecho de que el taekwondo mexicano siempre ha subido al podio desde que entró al programa oficial?
Creo que la presión sirve para levantarnos o estancarnos, y si hay presión yo la voy a tomar de buena manera para que haga elevar mi rendimiento. Es más, pienso que si México ha logrado medallas en todos los Juegos Olímpicos, yo tengo una gran posibilidad y estoy trabajando para ello, además creo que lo voy a hacer.
En tu camino tuviste una lucha interna con María Espinoza, ¿Qué tan complicado fue este proceso?
Honor a quien honor merece, María merece todo mi respeto y todo el honor, pero aquí cada quien busca su camino, y la vida es de ciclos y este es mi ciclo. Obviamente quien fuera de las dos a los Juegos Olímpicos sería una muy buena representante, en este caso me toca a mí y tomo la responsabilidad.
¿La preparación con Juan Moreno en Miami ha sido la adecuada?
Estoy satisfecha y a gusto, porque ha sido una preparación que se ha venido dando bien y hay que seguir jugando con lo que nos ha dado buenos resultados. Ya tengo aproximadamente dos años entrenando con Juan Moreno y con mi equipo, y ese trabajo ha estado funcionando en el campeonato del mundo del 2019, en los Juegos Panamericanos de Lima ese mismo año y en las evaluaciones internas, así que definitivamente se ha hecho un trabajo bastante fuerte, que ha sido muy inteligente y ahí están los resultados.