Tokio 2020, los Juegos Olímpicos que nos dieron esperanza

Tokio 2020

En el evento multidisciplinario observamos historias conmovedores y llenas de inspiración

El pebetero olímpico durante la ceremonia de clausura de Tokio 2020 (Reuters)
Ciudad de México /

Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, no solo serán recordados por las restricciones que se tomaron debido a la pandemia por coronavirus, ni por el hecho de ser la primera justa veraniega que se lleva a cabo sin la presencia de público, si no por los momentos conmovedores que llenaron de esperanza a la humanidad en uno de los momentos más complicados de su existencia.

La amistad, el espíritu deportivo, y el hecho de que los niños que compitieron en el evento multidisciplinario lograron medallas nos llenaron ilusión, pues significa que no todo está perdido, y que juntos podremos salir delante de esta triste situación que estamos viviendo.

Medalla compartida

En la final de salto de altura, Mutaz Essa Barshim de Qatar y Gianmarco Tamberi de Italia compartieron la medalla de oro, luego de una competencia muy reñida la cual duró aproximadamente dos horas. Ambos atletas finalizaron con un salto de 2,37 metros, pues al intentar los 2,39 metros ambos fallaron. Uno de los jueces les ofreció un desempate, pero para determinar al ganador, pero Barshim y Tamberi decidieron compartir el podio, una imagen que le dio la vuelta al mundo.


Tejiendo la gloria

Una de las imágenes que sorprendió a todo el mundo fue la de Tom Daley, clavadista británico que ganó la medalla de oro en plataforma de 10 metros sincronizados junto a su compañero Matty Lee.

En el centro acuático de Tokio se observó a Daley con dos agujas de tejer y estambre, pues le estaba haciendo un jersey a su bulldog francés Izzy, y posteriormente fabricó una cárdigan como recuerdo de su participación en los Juegos Olímpicos. El tejido le resulta relajante al británico.

De igual forma, Tom se dijo orgullosamente de pertenecer a la comunidad LGBTQ+.

Me siento increíblemente orgulloso de decir que soy gay y también campeón olímpico. Cuando era más joven, pensé que nunca lograría nada por ser quien era. Ser campeón olímpico ahora solo demuestra que puedes lograr cualquier cosa”.


Espíritu deportivo

En la semifinal de los 800 metros, se registró un accidente en la pista cuando Isaiah Jewett, de los Estados Unidos, y Nijel Amos, de Botswana, tropezaron y cayeron sobre el tartán. Luego de varios segundos sentados en la pista, ambos corredores se pusieron de pie, se dieron la mano y caminaron abrazados hasta la meta.

Para su desgracia ambos quedaron fuera de la final, pero esta imagen pasará a la inmortalidad de la justa veraniega, debido al compañerismo y espi´ritu deportivo que ambos mostraron.

Mente sana en cuerpo sano

La gimnasta estadounidense, Simone Biles no participó en la final por equipos en la gimnasia artística debido a que cuidaría de su ‘salud mental’, situación que resintió el equipo norteamericano, quien perdió ante Rusia. Lo destacable fue que la atleta mostró la fragilidad que tienen los deportistas, quienes también tienen problemas mentales como ansiedad, depresión, etc, y que tienen que dejar a un lado para competir, situación que las orilla a no disfrutar su disciplina y en muchos casos no dar los resultados que se esperaban.


FCM

  • Tonatiuh Guerra
  • gerardo.guerra@milenio.com
  • Reportero en La Afición. Egresado de la Licenciatura en Periodismo en la Escuela de Periodismo Carlos Septien García

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