El Azteca: ¿un estadio obsoleto?

En los últimos años, el Coloso de Santa Úrsula se ha sometido a remodelaciones que no han sido bien llevadas; con liguilla, posibles juegos de la NFL y el Mundial de 2026, la correcta mejora del inmueble es obligatoria

Estadio Azteca (Imago)
Ciudad de México /

La cancelación del juego de la NFL en México entre los Jefes de Kansas City y los Carneros de Los Angeles ha sentado un precedente en el historial del Estadio Azteca, un inmueble que, si bien es históricamente uno de los más representativos en el balompié mundial, su adaptación al siglo XXI a través de las remodelaciones no ha sido la correcta. 

El inmueble, fundado en 1966, vive actualmente una de sus peores etapas de su existencia, al tener un campo en estado deplorable, producto de una mala planeación en la instalación del césped híbrido –se realizó en tan solo 40 días sin la posibilidad de permitirle afianzarse correctamente-, las constantes lluvias en la capital, y la recurrente actividad deportiva –partidos de Liga y Copa entre Club América y Cruz Azul, así como conciertos-. 


El Coloso de Santa Úrsula se ha sometido en los últimos años a remodelaciones que, si bien no han sido del agrado de todos los aficionados, han sido necesarias para modernizar este inmueble. El crecimiento de los vestidores, la reducción del aforo, la mejora de la zona de prensa y las zonas vip, entre otros ajustes, fueron necesarios para que se pudieran albergar juegos de la NFL en 2016 y 2017. Sin embargo, para esta edición, la situación del pasto fue determinante para cambiar el juego a Los Ángeles, a seis días del cotejo originalmente programado en nuestro país. 

LAS NORMAS QUE NO SE CUMPLIERON 

En su sitio de operaciones, la NFL explica a detalle los puntos que una cancha debe cumplir para poder albergar uno de sus partidos. “El departamento de Operaciones de Futbol Americano de la NFL no deja nada librado al azar cuando prepara los campos para el día del partido”, se lee en su página. Y no es para menos. 

En sus reglas, la National Football League establece que “los equipos locales (en este caso la organización del juego en la CdMx) son responsables de asegurarse de que sus campos cumplan con las normas”. Si no llegaran a cumplir los parámetros, los responsables deberán resolver el problema y probar de nueva cuenta el campo un día antes del partido. 

Los expertos en certificación del campo prueban todos los campos, tanto de pasto sintético como de pasto natural, para determinar la firmeza hasta 72 horas antes de un partido. Un medidor de impacto Clegg deja caer un peso determinado en varios puntos designados de un campo para medir su firmeza. Los puntos que sean demasiado duros o demasiado blandos deben arreglarse y probarse nuevamente y pasar la prueba antes del día del partido. 

Antes de cualquier juego, la NFL exige una inspección visual para ver si existen defectos u objetos extraños. Para esto, se llega a recorrer el terreno con un imán para buscar elementos como tornillos o tuercas que hayan quedado sueltos luego de un concierto; tacos que pueden haberse caído de las zapatillas de los jugadores u otros elementos que pudieran perjudicar. 

Si se realiza un concierto u otro evento de cualquier índole antes del partido, el relleno debe ser probado entre un evento y el cotejo. 

Asimismo, se recomienda tomar en cuenta las fechas de los eventos programados para planificar correctamente y hacer lo necesario para efectuar las reparaciones pertinentes. 

Estos fueron los principales puntos que el Estadio Azteca no pudo cumplir y evitó que la NFL pudiera llevarse a cabo este año. 

¿Qué le depara al Azteca? 

Aunque el juego se haya cancelado, la administración del Coloso de Santa Úrsula tiene la obligación de hacer mejoras lo más pronto posible, para evitar más afectaciones a corto, mediano y largo plazo. 

Por un lado, Club América y Cruz Azul avanzaron a la liguilla, y el terreno está en condiciones que pueden llegar a afectar a jugadores de ambas escuadras. La cosa no termina ahí, pues los demás equipos también requieren de medidas que garanticen su seguridad para los próximos torneos. 

Aún hay un contrato con la NFL para traer más juegos, por lo que se deberán cumplir con los estándares al pie de la letra. Mención aparte para el Mundial conjunto de 2026 entre México, Estados Unidos y Canadá, con el Azteca como uno de los estadios elegidos en el proyecto.

Se prevé que albergue la inauguración, por lo que es obligatorio realizar las remodelaciones correctas, sin afectar más a un inmueble que llegará a sesenta años para cuando se lleve a cabo la Copa del Mundo.


  • Michel Cruz
  • oswaldo.cruz@milenio.com
  • Reportero en La Afición desde 2016. Egresado de la Licenciatura en Comunicación y Periodismo en la FES Aragón, UNAM.

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