Para muchos, Jimmy Garoppolo fue la estrella más importante del partido de la NFL en México. El quarterback recuperó la titularidad este año con los 49ers de San Francisco y se ha ganado el gusto de las aficionadas por su atractivo físico, además de que se reconoce que su veteranía ayuda a tener un equipo competitivo y ya jugó un Super Bowl (LIV).
Es por lo que cuando la cámara lo enfocó durante la entonación del himno de Estados Unidos, el público enloqueció y lo aclamó. Y así se mantuvo todo el Monday Night Football, en el que los Niners derrotaron por 38-10 a los Cardenales de Arizona.
“Sí, ese himno fue realmente genial. Toda la atmósfera esta noche, no he jugado en una atmósfera como esta. Era eléctrico… los fanáticos estaban locos. Estuvieron animando durante todo el partido, que parecía un partido de futbol en algunos puntos, solo la pasión que trajeron y todo eso. Fue realmente genial. Me encantaría hacerlo otra vez. Agradezco al público de México y todo”, fueron las palabras de Jimmy G al término del partido.
Y eso mismo ayudó a que Garoppolo le tuviera afecto a la afición de nuestro país, pues el constante apoyo que recibían les ayudó a pasar una de sus mejores experiencias como jugador de la NFL y, por supuesto, para conseguir la victoria en el Coloso de Santa Úrsula.
“Los amo. Los fanáticos mexicanos estaban locos. Nos encanta eso. Como equipo, nos pone en marcha, la pasión con la que gritaban, la energía que traían. Fue una noche divertida. Me encantó”, aseguró.
Sobre los retos de jugar en la capital del país, enfatizó en algo que muchos ponían como el principal reto para los atletas estadunidenses que juegan en México: “La altitud era real”, además de mandarle palabras de aliento a los niños que lo vieron jugar en este partido.
“Sigan adelante. Tienes que soñar en grande, creo. Todos fuimos niños pequeños en algún momento. Si sueñas en grande, puedes lograr algunas cosas buenas. Sigue soñando, sigue trabajando duro y te sucederán cosas buenas”.
FCM