Muchos jugadores procuran pasar bien el tiempo antes de llegar al Super Bowl, divertirse un poco y aprovechar que son el centro de atención. Pocos lo consiguen al grado en que Mecole Hardman lo hace.
El joven receptor de solo 22 años de edad estará jugando su segundo Súper Domingo, y la experiencia que obtuvo el año pasado le dejó una enseñanza: aprovecha cada momento.
Mecole sabe que puede ser el ‘arma X’ que defina el Super Bowl, pero no se agobia por ello, él prefiere divertirse y sonreír, bromeando con la prensa que le dedica una pregunta: “¿Alyson... mmm?, ¿con una ‘l’ o con dos?... mmm”, dice previo a contestar una pregunta, y al hacerlo acompaña su respuesta con una gran sonrisa y un “muchas gracias”.
Ese es Mecole Hardman, quien esta temporada consiguió cuatro touchdowns en la fase regular y en lo que va de la postemporada ya sumó una más, promediando, además, 10.3 yardas en cada recepción.
Ese es Mecole Hardman, el hombre que recuerda, y con mucho gusto, a México.
“Amo México. Amo a todos allá. Fue una gran experiencia ir a jugar allá, con el público interactuando y todo eso, así que me encanta que tengamos aficionados allá, tú sabes, los fans en Twitter e Instagram, apoyándonos, son un grupo de aficionados con una energía muy agradable”, dijo Hardman en referencia a los aficionados a los Chiefs que envían su apoyo desde México.
Por ahora, Mecole está concentrado en una cosa: ganar. Y mejorar sus números en comparación a lo que consiguió el año pasado ante San Francisco no será complicado, pues sólo tuvo una recepción para 2 yardas y un intento de acarreo en el que perdió 6 yardas.
Este año pinta mejor, y en el Super Bowl LV, Mecole Hardman, un gran admirador de Devin Hester, podría usar su velocidad endemoniada para convertirse en un jugador que incline la balanza. Por ello, lo mejor será no perder de vista al número 17.