Solo estuvo ocho años en la NFL, pero fue considerado por muchos como uno de los mejores linebackers de la Liga en, por lo menos, la mitad de su carrera. Patrick Willis fue uno de los mejores defensivos que han pasado por los emparrillados, un fiel gambusino que estuvo toda su carrera con San Francisco 49ers y que este año tuvo el gran honor de formar parte de la clase del Salón de la Fama del Futbol Americano Profesional, con una ceremonia que se celebrará el 1 de agosto, cuando inicie la pretemporada con el partido entre Houston Texans y Chicago Bears. Una figura dentro y fuera del campo.
“Es importante tratar de lograr un impacto en los niños. Aunque los sueños de la NFL se pueden ver lejanos desde donde nací, finalmente lo alcancé. No hay nada que no se pueda cumplir con dedicación, esfuerzo y trabajo. Convivir con los niños me hizo retroceder varios años atrás y recordar a las personas que fueron importantes en mi formación como jugador y persona”, reconoció Willis en una entrevista grupal en la que participó MILENIO-La Afición por una clínica que impartió en Los Cabos.
Así forjó su leyenda
Patrick nació el 25 de enero de 1985 en Bruceton, un pueblo de apenas 1,500 personas en Tennessee. Llegó a la Liga tras jugar a nivel colegial con Ole Miss entre 2003 y 2006, convirtiéndose en una leyenda de este equipo. “Venir de un pueblo pequeño significa mucho. Yo quería ser un ejemplo para aquellos que vienen de comunidades no privilegiadas, de los barrios o que vienen de una generación difícil en general”, compartió.
Su debut en 2007 fue espectacular, al terminar con 174 tacleadas combinadas, líder de la NFL ese año y le valió una aparición en el primer equipo All-Pro, un Pro Bowl y el galardón al Novato Defensivo del Año. “Quise representar lo mejor, porque quizás no era el más talentoso, el más rápido o el mayor, pero gracias a la suerte, la gracia y el trabajo continuo tuve la fortuna de jugar futbol americano y hacer un impacto en otras personas”, recordó. “Fue una muy buena temporada, pero sobre todo aprendí el nivel de exigencia que debería poner en mí para mantenerme durante mucho tiempo en la NFL”.
Un juego que evoluciona
El futbol americano está en constante cambio, como se ve en los cambios de reglas y cómo parece que puede favorecer más a la ofensiva, con castigos que hace décadas eran impensables. Patrick lo aprendió en 2010, cuando les dijeron que a los receptores no se les podía golpear dentro de una zona de cinco yardas o representaba un pañuelo.
Adaptarse no fue sencillo, pero entiende que algunos cambios son para bien y como prueba está el hecho de que más gente voltea a verlos a través de otras variantes como el flag football, en donde pueden ver cómo los jugadores desempeñan posiciones tanto a la ofensiva como en defensa. Algo nuevo, pero emocionante para él.
“El juego está cambiando definitivamente. No quiero decir que ya no sea brutalmente físico como antes, pero definitivamente puedes sentir que la ofensiva está arriba en el juego”, dice. “Pero el cambio es una cosa constante en la vida, tienes que aprender a adaptarte y seguir creciendo. Creo que a largo plazo será benéfico. El futbol americano es un deporte físico y está cambiando en un gran modo”.
Seguirán contendiendo
El dolor aún sigue. Los 49ers cayeron en el Super Bowl LVIII ante Kansas City Chiefs en tiempo extra, pero el equipo tiene una base sólida para aprovechar esa ventana de oportunidad de su roster para ponerle fin a la sequía y ganar el sexto trofeo Vince Lombardi de su historia.
“Siento que tienen todas las piezas. Yo he jugado ahí y estamos hablando de los 49ers con posibilidades de ser campeones del Super Bowl, no solo desde esta temporada, sino desde hace algunos años, cuando estaban en el Super Bowl LIV; creo que primero debemos seguir llegando ahí y tal vez la próxima vez sea esa oportunidad, así que estoy esperando por ellos, creo que tienen todas las piezas, solo (faltan) algunos jugadores y ya”, culminó.
AVV