Los Denver Broncos hicieron un movimiento sorpresivo a dos semanas de que termine la temporada regular y todavía con posibilidades de lograr un boleto para los playoffs. Denver enviará a la banca a Russell Wilson, adelantó Ian Rapoport, insider de NFL Network y que Jarrett Stidham fue ascendido a titular, una noticia que después fue confirmada por la NFL.
Stidham abrirá el domingo 31 de diciembre ante Los Angeles Chargers y Wilson estará en el roster en calidad de quarterback suplente, de acuerdo con Tom Pelissero, también experto de NFL Network. Con la medida, también se prevé que llame las jugadas ofensivas en el partido del 7 de enero ante Las Vegas Raiders, en donde podrían pelear de forma directa por un boleto de playoffs.
¿Por qué fue sentado?
De acuerdo con Rapoport, Wilson fue sentado por criterios financieros, al tener una garantía de lesión de $37 millones de dólares para 2025, la cual quedará completamente garantizada a partir de marzo, por lo que sentarlo se genera como una necesidad de evitarle una lesión, con lo que contará con flexibilidad financiera en caso de que el head coach Sean Payton decide no seguir su proyecto con Russell para 2024.
Con su pérdida de titularidad, se habla de que pudo ser el final de Wilson como la piedra angular de los Broncos (7-8), tras dos temporadas en las que el equipo no ha podido ganarle el título divisional a los Kansas City Chiefs (9-6), al punto de que marchan terceros en la AFC Oeste, por detrás de los actuales campeones de la NFL y de los Raiders (7-8). A Wilson todavía le deben 39 millones de dólares totalmente garantizados en 2024.
No es la primera vez
La temporada pasada, Las Vegas Raiders optaron por sentar a su entonces quarterback Derek Carr, en una estrategia similar a la de los Broncos. Lo interesante es que Stidham también había tomado la titularidad con los Black and Silver para culminar la campaña, en tanto Carr terminó por irse del equipo y firmó con New Orleans Saints.
Si bien Wilson mejoró en su segunda temporada, la ofensiva se ha trabado y provocó roces entre el quarterback y su entrenador en jefe. Denver se recuperó de un inicio complicado de 1-5 y ganaron cinco partidos de forma consecutiva, lo que los metió en los playoffs. Pero con tres derrotas en cuatro partidos, el panorama no es el mejor para el equipo que lideraba Wilson, quien llevaba 3,070 yardas, con 26 touchdowns y ocho intercepciones.
RGS