A un año de la muerte de la leyenda de la NBA, Kobe Bryant, el recuerdo de su deceso, junto a su hija Gianna y otras siete personas en un accidente de helicóptero, se mantiene aún fresco, tanto por la crudeza de las imágenes después del siniestro en la ciudad de Calabasas, como por lo mediático y las millones de reacciones que se generaron en las horas posteriores.
Uno de los momentos que más se recuerdan de aquel 26 de enero de 2020 fue cuando en los minutos previos del juego de la NBA entre los Nuggets y los Rockets, el sonido local de la arena anunció a los presentes que la leyenda de los Lakers había muerto.
En las imágenes de aquel encuentro se aprecia la figura de Kobe al centro de la duela y todos los presentes rindiendo un sentido homenaje; las caras largas y el llanto no se pudieron ocultar.
Aquella jornada de la NBA estuvo plagada por los sentidos tributos por parte de los equipos y las grandes estrellas del deporte ráfaga, sobre todo por parte de LeBron James, quien tardó en pronunciarse al respecto pero que fue uno de los más afectados por la relación tan cercana que mantenía con Bryant y su familia.