Dusty Baker continúa consolidándose como un mánager digno de pertenecer al Salón de la Fama del beisbol en Cooperstown. El manejador de los Astros de Houston se sumó a un club selecto: el de los 2 mil triunfos en Grandes Ligas.
Baker es el primer capataz afroamericano que llega a dicha cifra, gracias a la victoria 4-0 de los Astros sobre los Marineros de Seattle en Minute Maid Park.
“Pienso en toda la gente que hicieron posible que yo estuviese en esta posición – mi papá, Jackie Robinson, Frank Robinson, Cito Gastón – los muchachos que representaron a las minorías como dirigentes antes que yo”, dijo Baker, reflexionando sobre todos aquellos íconos de la pelota caliente en las Mayores. “Ves muchachos como Maury Wills y algunos de los muchachos que conozco. Para mí, todo el mundo está sacándolo a relucir más que yo porque tengo trabajo por hacer”.
A sus 72 años, Baker es el duodécimo mánager de la Liga Nacional y Americana que consigue 2 mil victorias y el primero de la cultura afroamericana en conseguirlo. Lo más sorprendente de todo es que 10 de estos dirigentes ya están en el Salón de la Fama, con Bruce Bochy (2 mil 3 triunfos) como el único que todavía no es inmortalizado en el recinto de los inmortales, debido a que aún no puede ser elegido.
La victoria fue para Cristian Javier, quien trabajó por 5.1 entradas, en las que recibió dos hits, concedió dos bases por bola y ponchó a cuatro rivales; la derrota se la llevó Chris Flexen, con cinco innings de trabajo, dos imparables, una carrera limpia, tres pasaportes regalados y dos chocolates recetados.
FCM