Los Dodgers vuelven a su casa, esa es una buena noticia para ellos, pero si no logran cambiar algunas de las cosas que han mostrado hasta ahora las opciones para meterse en la pelea en el Clásico de Otoño no son muy altas.
Estos son tres aspectos que jugaron en su contra en los dos primeros duelos:
Más entradas de su abridor
Uno de los planes que no se ha concretado es que los abridores se mantengan más allá de la quinta entrada, lo que no solo le da descanso al bullpen, sino que permite que el rival esté controlado. Tanto Andrew Buehler como Rich Hill (abridor del Juego 4) tendrían que marcar la diferencia llegando hasta un sexto o séptimo inning, con lo que pondrían el equipo en una gran posición para ganar. Tanto Clayton Kershaw como Hyun-Jin Ryu solo alcanzaron el quinto rollo pero ninguno sacó los tres outs en esa tanda.
Anotar temprano
El equipo angelino anotó casi cien carreras en cuatro de las primeras cinco entradas en la temporada, lo que se convirtió en una buen apoyo para su pitcheo, que normalmente después del quinto inning es cuando más fue lastimado. Enfrente tienen a un equipo que va 9-0 en estos playoffs cuando anota primero, y eso es lo que deben evitar, teniendo que ser ellos los que tomen el control pronto. La novena californiana tuvo a la cuarta entrada como la más productiva durante la temporada, al anotar 107 veces.
Ser más agresivos en el pitcheo
Los Medias Rojas han anotado nueve de sus 12 carreras en estos playoffs con dos outs en la pizarra, además de que han aprovechado lo que Dodgers le ha dado al negociar siete pasaportes en esta serie. Los angelinos deben ponerse al frente en la cuenta y ser más agresivos en sus pitcheos para no solo evitar bases por bolas sino para concretar outs, buscando que más lleguen por la vía del ponche.