Todo mundo lo conoció como El Toro Valenzuela, un apodo inconfundible con el que se encumbró el que ha sido considerado el mejor beisbolista de todos los tiempos: Fernando Valenzuela Anguamea.
Como es bien sabido, el nacido en Etchohuaquila, Navojoa, Sonora, fue firmado por los Dodgers de Los Ángeles el 6 de julio de 1979 para debutar un año más tarde en 1980, precisamente un 15 de septiembre.
A partir de ese momento comenzó la carrera más importante de un mexicano en las Grandes Ligas, en la que Fernando conquistó miles de corazones con su brazo izquierdo de donde surgía su inigualable screwball, mejor conocido como tirabuzón.
En 1981, el mánager Tom Lasorda le dio la oportunidad al joven que apenas tenía 19 años de cargar con el rol estelar en el pitcheo de los Dodgers ante la baja por lesión de Jerry Reus. Y de ahí se derivó una temporada de ensueño en la que ganó el Cy Young, el Novato del Año y posteriormente la Serie Mundial.
¿Por qué le decían el Toro?
Hay diferentes versiones sobre el emblemático apodo que acompañó a Fernando Valenzuela después de su debut en las Grandes Ligas. Una de las más aceptadas es que este sobrenombre apareció luego de que un medio local, Los Ángeles Herald Examiner, realizó un concurso entre los aficionados para encontrarle un apodo al joven mexicano, que en su primera temporada robó cámara con sus grandes actuaciones. La mayoría de las personas votaron por El Toro.
Otra de las versiones que se maneja sobre el nombre de batalla de Fernando, es que los aficionados lo empezaron a identificar como El Toro debido a su estilo de lanzamiento. Como se sabe él se hizo famoso con el famoso tirabuzón, pero también tenía la peculiaridad de que cada que realizaba un pitcheo su windup incluía una mirada al cielo.
Cualquiera que haya sido la razón, lo cierto es que a Fernando, El Toro Valenzuela siempre se le conoció de esta forma.
ZZM