Ni los fans ni los peloteros vieron que hubiera algún jugador tricolor con el desempeño suficiente para ser considerado para el Juego de Estrellas, siendo la tercera ocasión en cinco años en que no se cuenta con la presencia de un mexicano en este evento.
Adrián González y Roberto Osuna fueron los últimos jugadores de nuestro país elegidos para este evento, donde por medio de una amplia votación en la que participan los fans, peloteros y hasta la oficina de MLB, se elige a los participantes, dejando ver el profundo hueco que existe en lo que respecta al impacto que pueden tener los jugadores nacionales en las Ligas Mayores en la actualidad.
En este momento hay nueve mexicanos en activo en la Gran Carpa, uno a la ofensiva (Christian Villanueva) y el resto como pitchers abridores (dos) y relevistas (seis), pero a pesar de que al menos Villanueva está teniendo un buen año a la ofensiva (19 cuadrangulares y 43 producidas), sus estadísticas no resultaron lo suficientemente buenas para aparecer en el listado de elegidos.
Al grupo de mexicanos en MLB se le puede unir Marco Estrada y Miguel González, ambos fuera por lesión, además de Fernando Salas, quien acaba de convertirse en agente libre, misma situación en la que se encuentra Adrián González. De igual manera, para agosto, ya se tendrá de vuelta a Osuna, último participante tricolor en este duelo. Mientras otros han ido subiendo y bajando a sucursales.
A lo largo de la historia México ha tenido a 14 representantes en este duelo, comenzando con Roberto Beto Ávila, quien en 1952 se convirtió en el primer mexicano en este encuentro, participando como segunda base titular, yéndose de 2-1 con una carrera producida.
Mientras Osuna fue el último, luego de que entró como sustituto el año pasado, en el que trabajó una entrada en blanco para el equipo de la Americana.