El boxeo tiene sus orígenes en Estados Unidos en el siglo XIX proveniente de Inglaterra, pero si bien hoy se conoce como el epicentro del deporte debido al gran auge de la último centenario, hubo una época en que era ilegal practicarlo y se tuvieron que llevar a cabo combates clandestinos para evitar arrestos y la cárcel.
Más raro aún puede sonar hoy en día, que el proceso de su legalización fue impulsado por el músculo del movimiento cristiano, que consideraba que este tipo de deportes incrementaba el carácter físico y moral de la gente. ¿Cómo fue la prohibición? Se dio en algunos estados y en varias ocasiones con leyes vagas o estatutos no tan específicos, bajo la premisa que eventos de combates incitaban no solo a la violencia, si no que se combinaban en un ambiente anti puritano.
En California se legalizó un 4 de noviembre de 1914, pero un momento aún más importante llegó junto a la ley Walker de 1920, que legalizó después de tres años de prohibición las peleas, por premio en el estado de Nueva York al establecer la Comisión Atlética del Estado de NY, esto llevó a que otros 13 estados crearan la Asociación Nacional de Boxeo y así se comenzó a regularizar las peleas.
Sin ser una sorpresa, Nevada fue el primer estado en legalizar el boxeo en 1897, ya que lo vieron como una oportunidad para atraer dinero y desarrollo económico tras un estancamiento en su pequeña población. La comisión en cambio, quizá de las más populares hoy en día por regir las estelares peleas en Las Vegas, fue creada hasta 1941.
JMRS