Ya todo está dicho, sólo la báscula es el único obstáculo que se interpone entre Miguel Berchelt y Oscar Valdez de cara al duelo que tienen pactado este fin de semana en La Burbuja de Las Vegas.
El encuentro que tendrá no solo como recompensa el título superpluma del Consejo Mundial de Boxeo, si no que además abrirá las puertas de la elite boxística para el ganador ha generado gran expectativa en los fanáticos quienes hasta el momento tienen como amplio favorito al monarca y noqueador Miguel Berchelt.
“No es nada personal con Miguel Berchelt, lo considero mi amigo, pero solo quiero el título que tuvieron mis ídolos. Para ser honesto es un honor estar en este punto. Me encantaría que mis hijos y nietos podieran ver lo mejor de los dos arriba del ring. Es donde empieza la magia”, declaró el retador Oscar Valdez durante el penúltimo encuentro amistoso que tendrán ambos peleadores.
En una semana atípica, en donde la sala donde se encontraron para la última conferencia de prensa no contaba con la respuesta clásica de los fanáticos - debido a las limitaciones generadas por la crisis sanitaria por coronavirus - los estelaristas compartieron el estrado sin contratiempos e incluso a la hora de encararse se dieron la mano y fueron cordiales.
“Me siento muy contento, es la pelea que había estado esperando por mucho tiempo la verdad que respeto a Oscar, es un excelente peleador y lo sigo desde los juegos en Beijing. Estoyo ansioso y bien preparado porque sé de la calidad de rival que tengo enfrente”, dijo en su turno al micrófono en monarca que va tras la séptima exposición.
Ambos coincidieron no sólo en que este será el reto técnico y táctico más importante hasta el momento en sus carreras, por lo que destacaron sus preparaciones al lado de Jose Alfredo Caballero y Eddy Reynoso, dos de los mejores estrategas del momento, las cuales serán claves al momento de encararse. También en que este encuentro llevará su boxeo a otro nivel, con la posibilidad de que la pelea se sume a la lista de las mejores peleas de mexicanos de todos los tiempos.