Emanuel Navarrete visitó la lona y sin embargo no fue suficiente para poder doblegarlo. A pesar de haber estado aturdido por un golpe a la mandíbula, el peleador mexicano se levantó para conquistar por nocaut en nueve rounds la corona superpluma de la Organización Mundial de Boxeo al dar cuenta del australiano Liam Wilson en Glendale, Arizona.
El mexicano, quien llegó dispuesto a convertirse en el décimo tricolor dueño de tres divisiones diferentes, se encontró con un Liam Wilson que buscó en todo momento romper el ritmo con un contragolpeo organizado.
Sin embargo, el estilo poco ortodoxo del mexiquense, mezclado con la presión, estamina, fortaleza y corazón lo sacaron a flote, pues a pesar de lo lastimado que estaba logró terminar el cuarto round de pie.
"La satisfacción es enorme, me faltaba esta prueba para decir que mi carrera está más completa. El saber que puedo visitar la lona y levantarme es algo muy bueno. Estoy orgulloso de mi carrera y de lo que he logrado con mi equipo. Estoy pleno, satisfecho y contento", dijo tras la pelea Navarrete Martínez, quien además mejoró con esta victoria su récord a 36-1 con 30 nocauts.
Con esta victoria Navarrete se sumó a Marco Antonio Barrera, Wilfredo Gómez, Erik Morales, Manny Pacquiao y a Leo Santacruz como los únicos peleadores que han logrado unificar a los supergallo, pluma y superpluma. Además de que se unió a un selecto grupo de mexicanos tricampeones mundiales en igual número de divisiones que está conformado por las leyendas Julio César Chávez, Morales, Barrera, Jorge Arce, Juan Manuel Márquez, Fernando Montiel, Saúl Álvarez, Abner Mares y Leo Santacruz.
"Quiero poder demostrar que estoy hecho para un buen nivel en las 130. Quiero las peleas que el público quiere. Estoy hecho de esfuerzo, poder y corazón y del espíritu mexicano. Liam es un guerrero", abundó.
MGC