Considerada una de las mejores boxeadoras de la historia, Jackie Nava tiene la mirada hacia adelante. Después de 2020, todo indica que colgará los guantes y continuará con su vida fuera del ring, les dedicará tiempo a sus dos hijas y vislumbrará nuevos horizontes en su carrera profesional.
“Sería interesante poder apoyar a las boxeadoras, pero no como entrenadora, no me veo como entrenadora, me veo más apoyándolas y me gustaría dar algunas conferencias”, comentó la Princesa Azteca en una charla por Instagram Live de MILENIO-La Afición.
Por lo pronto, la última vez que la veremos arriba del ring será contra la Barby Juárez. Dicho enfrentamiento estaba programado para el próximo sábado 9 de mayo, pero la pandemia de covid-19 obligó a posponerla. Será a finales de año cuando la veamos por última vez en esta faceta, no sin antes concretar un combate intermedio, aunque ella no considera que sea de preparación.
“Hace tres semanas me informaron que se iba a posponer (la pelea contra la Barbie Juárez) porque no se podía llevar a cabo por las circunstancias. Es muy probable que se recorra a agosto o septiembre”, explicó.
Durante la plática, Jackie reflexionó sobre algunos capítulos de su vida, su rivalidad con Ana María Torres, sus comienzos en el boxeo y su legado en el pugilismo.
“Cuando empezamos, la gente no miraba mujeres. Necesitas llamar la atención, de la televisión, la promotora... y después ya poder pedir y exigir más”, dijo sobre la desigualdad que existe en el mundo del deporte y que, si bien están muy lejos de ganar cantidades estratosféricas como Canelo Álvarez, se han logrado muchos avances para las mujeres.
Nava también dijo que, de ser posible, le diría a su yo más joven que no fuera tan tímida, incluso recordó algunos de los momentos más emotivos de su carrera, como cuando ganó un torneo de kick-boxing en memoria de su padre o al ser la primera campeona del Consejo Mundial de Boxeo.
“Cuando gané el Consejo Mundial de Boxeo en 2005, en ese momento todavía no me caía el veinte de saber que era la primera campeona del CMB”, reconoció la pugilista, sobre el impacto emocional que tuvo ese hecho histórico en su vida.
“En un principio sí había un poco de recelo, de ver si ella era más o yo era más. Creo que fue un parteaguas donde hubo más interés hacía las mujeres”, aseguró Jackie, quien si bien se quedó con ganas de una tercera pelea (el balance fue de un empate y una derrota), comprendía que la decisión de Ana María fue para dedicarle tiempo a su familia, incluso mantiene una cierta relación de amistad no tan cercana con ella.
Asimismo, reconoció que, aunque en primera instancia no le gustaría que sus hijas lleguen a dedicarse al boxeo, no se los impediría, pero siempre y cuando tengan una carrera universitaria.