Con sólo 44 golpes conectados en 12 rounds disputados y en donde se la pasó evitando los golpes y empuje del monarca filipino John Riel Casimero, el multicampeón cubano Guillermo Rigondeaux sumó su segunda derrota profesional.
La noche del sábado en Carson, California, Rigondeaux sacrificó el supercampeoanto gallo avalado por la AMB, pues fue desconocido tan pronto como subió al ring, en busca de sumar la corona de la OMB que ostenta Casimero.
Sin embargo, con una defensa de altísimo nivel sin un ataque adecuado, Rigondeaux demostró maestría para dejar los golpes de su rival en el aire olvidando que él tenía que soltar sus puños también para convencer a los jueces.
Tras recorrer los 12 rounds entre capotazos a los envíos del filipino Casimero y abucheos de los asistentes, Rigondeaux escuchó cómo los jueces le dieron la victoria por decisión dividida a su rival. Las tarjetas fueron de 115-113 para el cubano, mientras que dos jueces vieron a Casimero imponerse 116-112 y 117-111.
"Rigo es un gran peleador, dos veces olímpicos, pero estaba preocupado porque no quería que corriera. Queria noquearlo, pero siempre estuvo corriendo, no peleó. Lo respeto mucho, pero yo propuse mucho la pelea”, setenció el peledor filipino quien adelantó que ahora quiere ir tras su compatriota y también campeón Nonito Donaire y el japonés Noya Inoue.
A pesar de las tarjetas y los abucheos, Rigondeaux se sintió robado por los jueces y aseguró que él ganó la pelea con lo suficiente.
"Claro que gané la pelea, soy la frustración de los pesos chiquitos. Conecté 44 golpes porque eran los necesarios para ganar la pelea. Yo soy así, nací así, Diosito me dejó ser asi y por eso yo gano. Por eso soy único", finalizó el peleador.
En la pelea preestelar de la noche, el estadounidense Gary Antonio Russell y Emmanuel Rodríguez sostuvieron un round en una pelea que fue declarada luego de un cabezazo que impidió que Rodriguez siguiera con la contienda. El corte que sufrió fue por un cabezazo no intención.
MGC