En el boxeo es raro que un peleador rechace una oportunidad por un título mundial, pero dos es casi único y esta vez fue el caso de José Carlos Ramírez, quien decidió dejar pasar por segunda ocasión consecutiva la disputa por el título mundial superligero del WBC.
La historia de Ramírez – quien llegó a ostentar dos títulos mundiales de las 140 libras al mismo tiempo – comenzó en el 2019 cuando se comprometió con la madre de sus hijos y la pandemia lo hizo ir aplazando poco a poco la ceremonia y cuando la crisis sanitaria se los permitió las probabilidades de la pelea de campeonato cayera justo el fin de semana de su boda eran altas y por eso tuvo que pasar. La segunda ocasión llegó esta semana, luego de una negociación fallida con el estadounidense Regis Prograis, con quien iba a perder dinero solo con subir al ring.
“Algo que debe estar claro es que no me asusta nadie, soy un mexicano, nací y fui criado en una muy pequeña comunidad de granjeros y nosotros trabajamos duro en el campo. Tenemos ese caracter, no nos asusta nadie, ni un pedacito”, dijo el peleador que ya prepara una segunda opción para arrancar con el 2023.
José Carlos está convencido de que los cinturones regresarán de nuevo a sus manos tan pronto como recupere el paso que tenía antes de la pelea de Josh Taylor, pero el hecho de ir por un campeonato del mundo peridendo dinero, no es su ideal.
“Prograis tiene un equipo pequeño, una promotora que no tiene televisora, y además no entiende del negocio (y debería hacerlo, por su familia). Quiere darme el 35 por ciento de una bolsa que ni él sabe cuanto es. Es imposible, por eso quiero ir tras Teofimo López”, abundó.
Para Ramírez, a pesar de la dudosa victoria de Teófimo López sobre el español Sandor Martin, la carrera del joven campeón de las 135 libras no está terminada y solo con regresar al gimnasio y asimilar todo lo que pasó es suficiente para regresar con fuerza. Tan seguro está que le ofrece una fecha a finales de marzo o abril para que sea el regreso de ambos.
Ramírez sabe que está en una de las divisiones más calientes del boxeo por lo que considera innecesario sacrificar una bolsa en pos de un título, pues sabe que tarde o temprano todo irá cayendo en su sitio y podrá recuperar esos fajines. Eso si, sin perder de vista una de sus metas: vengar la derrota que sufrió ante el inglés Josh Taylor.