El ucraniano Olexandr Usyk no sólo destronó a Anthony Joshua ante su propia gente la noche del sábado, también echó por tierra el deseo de que el inglés dispute el campeonato indiscutido de los pesos completos.
En una pelea en donde la estrategia e inteligencia de Usyk fue clave para maniatar a Joshua, el peleador que subió de peso crucero para conquistar las diademas de la Asociación Mundial de Boxeo, Federación Internacional de Boxeo y Organización Mundial de Boxeo metió sus combinaciones a placer ante un tímido Joshua que no pudo encontrar una forma de meter un golpe de poder que le hiciera ganar respeto y siguió el ritmo que le impusieron desde un principio, con la precaución de mantener la estamina. Sin embargo, nunca llegó el momento de que pudiera soltar los puños con confianza, pues Usyk siempre le quitó el impulso con combinaciones nutridas y a velocidad.
Con esta derrota Joshua sumó su segundo descalabro profesional, el primero fue ante el mexicano Andy Ruiz, para dejar su marca en 24-2, con 22 nocauts, y la posibilidad de ir por una pelea de unificación total de la categoría en punto muerto hasta que se resuelva lo de la clausula de revancha.
Por su parte, Usyk – quien sostuvo apenas su tercer encuentro en peso completo – mejoró su foja a 19-0 con 13 nocauts y sin duda escaló a una buena posición dentro del ranking de los libra por libra.