La última imagen que se tiene de Andy Ruiz sobre el ring es la de un boxeador fuera de forma, con notable sobrepeso, lastimado de la cara y con la mirada pérdida; quizá tratando de digerir, en ese momento, la caída tan abrupta de su campeonato mundial de pesos pesados.
Sí, ese 7 de diciembre de 2019, el boxeador de origen mexicano vio como el cuento de la Cenicienta que había protagonizado meses atrás, cuando de manera inesperada le arrebató el título mundial al británico Anthony Joshua, llegaba a su fin sin que pudiera meter las manos o los puños para evitarlo.
El exceso de festejo, la poca preparación, aunada con la falta de disciplina que mostró previo a la pelea, le cobraron una factura muy alta. “No me preparé como debía, gané mucho peso, pero si hacemos una tercera pelea, voy a llegar en mejor forma”, declaró esa misma noche el boxeador que cayó por decisión unánime.
Y ahora, casi un año y medio después, Andy Ruiz subirá de nueva cuenta al ring en una nueva versión mejorada y, sobre todo, disciplinada. Ha bajado 12 kilos respecto al peso que dio en aquella fecha y asegura que tiene una movilidad que nunca había experimentado. Sí, esta noche ante Chris Arreola, el Destroyer quiere borrar esa última imagen y demostrar que aún le queda cuerda para triunfar en el boxeo.
De la mano del Canelo’s Team
“Cuando perdí me sentí abajo, sin ganas de pelear, pero algo en mi corazón me dijo que me debía levantar y mostrar la disciplina que me faltaba”, reconoció hace algunos días Andy, en una conferencia organizada por el Consejo Mundial de Boxeo.
Sí, Andy Ruiz tenía ganas de volver por su revancha y por esa razón meses de la derrota con Joshua, el pugilista decidió terminar su relación tomó una decisión fundamental: cambiar de entrenador. A los pocos con Manny Robles, y casi enseguida buscó al mejor exponente mexicano, a Saúl Canelo Álvarez. Él tenía muy claro que bajo la batuta de Eddy Reynoso podría rescatar su carrera y convertirse en el boxeador que siempre había deseado ser.
“Le marqué al Canelo Álvarez para ver si me abrían las puertas, me dijo que conocía mis habilidades, pero necesitaba disciplina y es como hemos trabajado desde entonces”.
“Ya no quiero estar gordo”
Desde mayo del año pasado, Andy Ruiz se integró de lleno al Canelo’s Team. Desde esa fecha se dedicó a subir videos en su canal de Youtube de los entrenamientos que ha tenido con Eddy Reynoso y su grupo de trabajo. Se le nota enfocado y comprometido de nueva cuenta con su carrera deportiva.
Y el cambio más notorio se ha reflejado en su peso. La noche que perdió contra Joshua, la báscula le registró 128 kilos; hoy, para el combate ante Arreola, su peso es de 116.12; sí, 12 kilos menos. Incluso, una semana antes del compromiso, subió unas fotos en las que presumía un pesaje de 115.
Ayer, la playera que utilizó Andy para la ceremonia de pesaje tenía un mensaje claro y contundente, quizá su propia filosofía en estos momentos: “Ya no quiero estar gordo”, la frase iba acompañada con la imagen de un cerdo y la secuencia de una persona que del sillón se levanta para hacer ejercicio. Ruiz ya no es el mismo de hace año y medio. “Maté al viejo Andy”, dijo el martes pasado; hoy, el boxeo le da una nueva oportunidad.