La pelea por el campeonato mundial gallo del Consejo Mundial de Boxeo dejó un saldo negativo qué obligó al organismo a tomar cartas en el asunto.
Una defensa exitosa de la corona, una retadora con lesiones y un réferi suspendido fueron parte de las repercusiones de la velada en la Comarca Lagunera.
El viernes la campeona Yuliahn Luna retuvo el cinturón con una decisión unánime tras 10 rounds disputados. Sin embargo, la pelea fue muy complicada pues ambas peleadoras recurrieron a golpes ilegales ante la incapacidad del réferi Jesús Becerra por poner orden.
“Las dos boxeadores incumplieron, hubo fauls de ambas. El réferi perdió el control de la pelea y no aplicó el reglamento. Se le salió de las manos. Hablé con el réferi y está suspendido. Ahora el réferi tomará un proceso de recertificación con un acompañamiento de los renombrados réferis Héctor Afú y Lupe García. Arriba del ring la vida está en las manos del réferi y no puede pasar”, declaró Mauricio Sulaiman, presidente del WBC.
Jessica González no solo salió con una fractura de nariz que necesitó de una cirugía inmediata, también a su llegada a la Ciudad de México se le envió con un neurólogo y tras una valoración y estudios se determino que sufrió una contusión cerebral grave que la obligó a estar bajo supervisión y con nula actividad física por un periodo de tres meses.
“Esto no se trata de exhibir a nadie, pero sí de entender que el réferi, los jueces y supervisores tienen que responder a su actividad, si no están al nivel se toman acciones y ha servido muy bien en este proceso”, abundó el mandatario.
¿Qué es el golpe de conejo en el boxeo?
El ‘golpe de conejo’ en el boxeo es uno de los contactos prohibidos y más peligrosos. Consiste en dar un puñetazo directo a la parte trasera de la cabeza ya sea en forma recta o en gancho. Se le conoce con este nombre porque es justo la forma en como algunos cazadores dan muerte a los conejos, con un golpe rápido directo a la parte posterior del cráneo.
¿Cuáles son las consecuencias del golpe de conejo?
Este impacto prohibido puede tener consecuencias muy graves, puesto que podría dañar las vértebras cervicales y la médula espinal, tal y como sucedió con el ex campeón invicto Prichard Colón, quien entró en coma durante más de 200 días tras los golpes de conejo que recibió por parte de Terrell Williams.
Un mal golpe podrían incluso separar el cerebro del boxeador del tronco encefálico, lo que podría causarle la muerte instantánea.