Julio César Rey Martínez se proclamó campeón mosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) tras vencer por nocaut técnico en el noveno asalto a un valiente nicaragüense Cristofer Rosales.
En el pleito coestelar de la función que se realizó el viernes en el Talking Stick Resort Arena, Martínez se impuso a los 1:19 minutos del noveno asalto para quedarse con la victoria y el título en su poder.
Así México cerrará el año con ocho campeones mundiales este 2019, “Rey” Martínez con récord de 15-1, 12 por la vía del nocaut, mientras que su oponente se quedó con registro de 29-5, 20 antes del límite.
Casi cuatro meses después de tener el cinturón en sus manos, pero que no pudo conservar por un golpe fuera de tiempo, Martínez tenía una nueva oportunidad de proclamarse campeón del cetro vacante y no la desaprovechó con una gran exhibición.
Sin guardarse nada desde el primer asalto salieron ambos pugilistas, el mexicano el primero en atacar con sólidos bombazos y gancho de izquierda, lo que obligó al nicaragüense a responder de la misma forma y ponerse al tú por tú.
Un intercambio en el centro del ring emocionó a la gente en el segundo asalto, en el que Rosales conectó con una potente derecha a Martínez, quien aguantó a pie firme el tremendo impacto y que acabó el asalto con una cortada en la ceja derecha.
La rapidez de manos del Rey Martínez hacía daño al centroamericano, quien recibió un upper en el cierre del tercer asalto de parte de un mexicano que mostró toda la variedad de su arsenal en el cuarto, con uppers y ganchos que combinaba con ráfagas de hasta cinco o seis golpes.
Rosales sangraba de la nariz por los impactos del mexicano, que no dejaba de tirar golpes, sobre todo ese gancho que hizo tanto daño al ex campeón mundial, quien aguantó todo el castigo y que respondió a los ataques del mexicano.
Las combinaciones a dos manos eran constantes contra el Látigo Rosales, que en el séptimo fue llevado contra las cuerdas y castigado, y que en el octavo trató de poner distancia de por medio con un boxeo más inteligente.
El réferi advirtió a Rosales que si recibía intenso castigo tendría que parar la pelea, y así lo hizo en el noveno rollo, cuando Martínez le recetó una combinación de ocho golpes sin respuesta para la intervención del réferi y la coronación del mexicano