El mexicano Sebastián Hernández cae ante Junto Nakatani en intensa pelea en The Ring V: Night of the Samurai

Tras doce rounds de fricción pura, el pugilista japonés salió con la mano en alto ante el azteca por decisión unánime

Sebastián Hernández sufre polémica derrota ante Junto Nakatani (Reuters)
Olga Hirata
Ciudad de México /

Tras doce rounds de fricción pura, Junto Nakatani salió con la mano en alto ante Sebastián Logan Hernández. Sí, ganó. Pero el resultado oficial contó otra pelea. Y una de las tarjetas —ese obsceno 118–110— hizo más ruido que el propio triunfo. No por lo amplio, sino por lo falso.

Nakatani empezó siendo Nakatani: largo, ordenado, zurda punzante, control temprano. Todo en su sitio. El problema vino cuando Hernández decidió no pedir permiso. A mitad del combate le leyó el ritmo, le tocó el cuerpo, le caminó encima sin respetar el apellido ni la vitrina. No lo superó con fineza, lo incomodó con terquedad. Y eso, en el boxeo real, pesa. Ahí cambió la energía. Nakatani dejó de flotar y empezó a plantar. Las manos llegaron en solitario. Los pies, más pesados. El favorito ya no dictaba: respondía.

Del séptimo al undécimo, Nakatani pasó demasiado tiempo con la espalda cerca de las cuerdas, resolviendo presión en lugar de imponerla. Sí, conectó lo más limpio. Pero no mandó. Y en este nivel, el control no es un detalle: es el idioma. Hernández no ganó la pelea, pero ganó suficientes rounds para hacerla incómoda, para romper el hechizo. Expuso algo que no se borra con una decisión: a Nakatani no le gusta que lo caminen sin miedo.

Las dos tarjetas 115–113 se sostienen. Son peleas cerradas, se aceptan. La 118–110 no. El juez Nawaf Almohaimeed, con 118 votos a favor y 110 en contra, es el juez local de Arabia Saudita. Logan Hernández tenía las cartas en su contra. Esa tarjeta borra la segunda mitad, castiga el riesgo y manda un mensaje peligroso: que la presión no paga. Y sí paga. No siempre en el resultado, pero sí en la verdad del ring.

Hoy la pelea que late es Hernández vs Nakatani II. Porque esta historia quedó a medias y porque el ranking libra por libra no es un altar: es una evaluación viva. Nakatani ganó, pero salió señalado. Y cuando el papel miente, el ring siempre termina cobrando la factura.


FCM

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.