Antonio Mohamed fue, sin duda, uno de los jugadores más extravagantes que han estado en la Primera División de México, donde estuvo en equipos como Monterrey, León, Irapuato y Celaya, pero destacando principalmente en los Toros Neza. El Turco, además de llamar la atención por la manera en la manera en la que se teñía el pelo, resaltaba por estar algo pasado de peso, cosa que nunca ocultó.
El Turco, años después de haber colgado los botines, decidió revelar algunos 'secretos' y 'artimañas' que usaba cuando estaba con los Toros para ocultar su sobrepeso y así evitar que lo sancionaran económicamente, como dice que el presidente de Los Astados le advirtió.
"Yo tenía un presidente muy exótico, traje blanco, camisa roja, un espectáculo, que me decía, si yo le pago todo el contrato usted va a engordar y no me va a rendir. Entonces, se va a pesar cada 15 días y si está pasado del peso le voy a quitar tanta plata", señala Mohamed en el libro Una Vida Llena de Pasiones.
Ya advertido, Mohamed no podía ocultar su gusto por la comida de McDonald's; sin embargo, su esposa -Patricia González- decidió hacer que el jugador argentino entrara a una dieta basada en sopa de verduras, la cual tenía que consumir diario.
"Mi mujer sabía y se enojaba cuando yo estaba arriba (de peso), entonces todos los días me preparaba sopa de verduras y estaba rica, la verdad, pero comerla diario, ya no podía", confesó El Turco.
Pese a los intentos de su esposa, y el presidente de los Toros, por hacer que bajara los kilos de más que tenía, Mohamed no podía alejarse de la cadena de comida rápida por lo que reveló que llegaba después de los entrenamientos para comer dos hamburguesas y, posteriormente, acudía a su casa a comer la sopa de su conyugue.
"Entonces lo que hacía, en la entrada de la calle donde yo vivía había un McDonald’s, y todos los días, después de entrenar, pasaba al McDonald’s, me comía dos hamburguesas y llegaba con mi mujer y me comía la sopa, le decía 'Qué rica, ya estoy satisfecho' y con eso ya no me metía en problemas", develó el argentino.
Su 'trampa' para evitar problemas en Toros
Mohamed ya estaba advertido sobre su sobrepeso por el presidente del club, quien lo amenazó con quitarle parte de su salario; sin embargo, el gusto por la comida rápida hizo que el Turco -en complicidad con un trabajador de los Toros- se ingeniara una manera de engañar a la directiva con su peso.
"Yo sabía que no iba a dar. Tenía que estar en 83, 83 y medio kilos a lo mucho y el utilero sabía, yo le compraba comida, le daba ropa del club, playeras para que le moviera un tornillito y antes de que entrara el doctor le movía y listo, nunca me agarraron", señaló en la misma publicación Mohamed.
No obstante, un día el argentino y el utilero se enfrentaron al problema de que la bascula que truqueaban había sido sustituida por una digital, la cual -sin duda alguna- iba a revelar el verdadero peso de Mohamed. Empero, el Turco supo como arreglárselas para salirse con la suya.
"Un día llego a entrenar y me dice el utilero 'Toni, viste, nos cambiaron la báscula, se la llevaron, van a traer una más nueva'. Yo cuando vi que era una electrónica dije 'esta no va más aquí' y la rompí. A los dos días que llegó la cargué y dije 'ay, perdón, se rompió'", concluye la anécdota el Turco.
Mohamed estuvo durante cinco años en la institución de Ciudad Neza, donde llegó a estar presente en una final ante Chivas. Fue en 2003 cuando decidió retirarse en territorio azteca con el Zacatepec.
EML