Este 26 de enero se cumple el primer aniversario luctuoso de Kobe Bryant, su hija Gianna Maria y siete personas más, quienes murieron en un accidente de helicóptero en Calabasas, California.
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Desde el momento en el que se anunció el lamentable fallecimiento, las muestras de cariño no se hicieron esperar, ya que aficionados de Los Angeles Lakers empezaron a atiborrar de flores, playeras y velas las inmediaciones del Staples Center.
Fue en ese mismo lugar, donde casi un mes después de su muerte se le realizó un homenaje a Black Mamba, sitio en el que hubo varios discursos muy emotivos, pero sin lugar a dudas, el más estremecedor fue el de su viuda, Vanessa Bryant.
Vanessa fue recibida entre aplausos en un Staples Center lleno, donde entre lágrimas agradeció a todos los presentes por apoyarla a ella y su familia en momentos difíciles con palabras de aliento; en ese mismo lugar, la viuda de Bryant comenzó a hablar de su "pequeña niña".
“Mi pequeña niña, Gianna Bryant es una alma increíblemente dulce y gentil, siempre me besaba para las buenas noches y me besaba para los buenos días. Hubo algunas ocasiones en las que pensé que se había ido al colegio sin decir adiós. Le envié un mensaje de texto y decía '¿Sin beso?' Y Gianna respondía con un 'mamá, te besé, pero estabas dormida y no quería despertarte", fueron las primeras palabras de Vanessa.
“Era la niña de papá, pero sé que amaba a su mamá y siempre me lo demostraba y decía que me amaba. Ella era una de mis mejores amigas".
La esposa de Kobe lamentó no poder vivir momentos importantes con su hija, pues no podrá verla aprender a conducir o el día de su boda, o verla bailar con su padre, incluso no ver a sus nietos.
"No tuvimos la oportunidad de enseñarle a conducir un auto, no podré decirle lo hermosa que se ve en el día de su boda. Nunca veré a mi bebé caminar por el pasillo, hacer un baile padre-hija con su padre, bailar en la pista conmigo, o tener sus propios bebés".
"Mi alma gemela, era mi todo"
Después, Vanessa recordó a quien fuera su gran amor desde los 17 años y padre de sus cuatro hijas, y aunque era una máxima figura del basquetbol, ella siempre lo vio como su alma gemela, un gran esposo y padre.
“Mi alma gemela, Kobe era conocido como un feroz competidor en la cancha de basquetbol, el más grande de todos los tiempos, escritor, ganador del Oscar y The Black Mamba, pero no podía verlo como una celebridad ni como un increíble jugador de basquetbol, era mi dulce esposo y el hermoso padre de mis hijas. Él era mi todo”.
La viuda de Kobe con la voz entrecortada hizo hincapié de lo grandioso que fue el ex basquetbolista, aún después del retiro, quien se dedicó de lleno a su familia, a hacerlas felices; fue la última parte de su discurso el momento más emotivo, pues le pidió que cuidará a su pequeña Gigi en el cielo.
“Dios sabía que no podían estar en esta Tierra el uno sin el otro, tenía que traerlos a casa para traerlos juntos.Cariño, cuida a nuestra Gigi, tengo a Nati, Bibi y Koko y seguimos siendo el mejor equipo. Te extrañamos Bubu a Gigi. Que ambos descansen en paz y se diviertan en el cielo hasta que nos volcamos a encontrar algún día. Los amamos a los dos y los extrañamos para siempre y por siempre, mami”.
Un año ha pasado de este lamentable suceso, donde Kobe Bryant dejó un gran vacío que no se podrá llenar nunca, pues los aficionados de los Lakers y todos aquellos que pudieron ver su talento nato sobre la duela, saben que el cielo cuenta con un ángel de la NBA.
ZZM