Carles Puyol fue un defensor del FC Barcelona que destacó por su actitud sobria dentro del terreno de juego, misma que llevaba a los vestidores y a su vida privada.
El Tarzán de La Pobla era alguien respetado en el vestuario blaugrana; sin embargo, un joven Gerard Piqué -en complicidad de Cesc Fábregas- decidieron hacerle una broma, la cual casi termina con Puyol golpeando a los implicados.
Recientemente, Fábregas rememoró la anécdota que vivió cuando junto con Piqué decidió esconderle el celular a Puyol.
“Recuerdo un día que Gerard (Piqué) y yo dejamos la cancha tras el entrenamiento y tomamos el celular de Puyol para esconderlo. Y se volvió loco. Se volvió loco porque no podía encontrar su teléfono. Me estaban dando tratamiento, vino hacia mí, me agarró y me puso contra la pared, y le dije: ‘No, no, no soy yo’. Intenté ser fuerte porque entre Gerard y yo dijimos: ‘No importa qué, incluso si nos pega en la cara, no diremos que fuimos nosotros’. Estaba a nada de pegarme. Y como estaba diciendo que no, me creyó. Porque pensó: ‘OK, si estuviera mintiendo, ya lo hubiera dicho’.”, aseguró Cesc.
Asimismo, el mediocampista reveló que Gerard Piqué lo ‘echó de cabeza’ al instante en el que Puyol lo amenazó con golpearlo.
“Piqué estaba en la ducha, así que fue por él y lo sacó. Lo agarró así, a punto de golpearlo, y (Piqué) dijo: ‘Es Cesc, es Cesc, es Cesc’. Así que me delató. Yo lo protegí y él me delató en un segundo. Desde entonces, no confío más en él”, señaló el actual mediocampista del AC Mónaco a Oh My Goal.
Tanto Piqué, como Puyol y Fábregas fueron parte importante durante la temporada dorada del Barcelona, así como con la selección española, donde ganaron el Mundial de Sudáfrica 2010.
EML