Como jugador fue uno de los históricos vistiendo la camiseta de Atlas. ¿Su carrera se pudo prolongar? Seguramente, pero las malas decisiones no le permitieron explotar su potencial de la forma en que hubiera deseado.
Daniel Osorno reconoce no ser una blanca paloma, no todo fue malo, pero hay pasos que saben que le costaron muy caro como el hobby que llegó a tener en 2003 con su banda de música “Pura Caña”, con la que perdió grandes cantidades de dinero.
“Puede ser eso de la banda (lo que cambiaría de su carrera), pero lo hice por hobby, mucha gente piensa que soy una persona borracha, pero ni tomo, ni fumo ni nada, hay que demostrar con hechos; uno debe mostrar lo que uno es, yo agradezco a mi esposa y a mis hijos, sé que estas situaciones son difíciles, uno debe ser como persona lo que uno es, en mis 20 años (de carrera) lo disfruté”, dijo.
Cambiar no significa arrepentirse, pues Osorno considera que no se cuenta la otra parte de la historia, esa en donde ofreció su lado humano y brindó ayuda a gente que de verdad lo necesitaba.
“Yo agradezco a Dios que tengo mi familia, tengo mis cosas, así son las redes. ¿Por qué no cuentan sobre la gente que ayudé? Muchas cosas que he logrado en la vida y con eso basta, sé la clase de persona que soy, me he equivocado, me he divertido, son cosas del pasado”.
En charla con Milenio-La Afición habló sobre el desfalco del que fue víctima con el proyecto de “Pura Caña”, el cual le dejó como lección aprender a confiar en las personas adecuadas.
“Yo viajé a Estados Unidos (Colorado Rapids) y ya no hubo comunicación, yo las cosas las dejé porque en la banda me robaron detalles y todo, pero me fui a jugar (2007), no hubo la misma química y dije, bueno, es momento de dejarla aparte. No me arrepiento de nada, lo disfruté, duré cinco años y es lo más bonito que viví, lo único que pido es que tengan cuidado con lo que hagan, que como jugadores lo hagan todo al 100 por ciento y que no se distraigan de nada”.
Y es que muchas veces el futbolista profesional vive en una burbuja que no le permite darse cuenta de cómo las pequeñas acciones traen grandes consecuencias.
“Hay que tener cuidado en lo que uno haga, en redes, en fiestas, ahora los jugadores deben prepararse y ser diferentes para aprovechar la oportunidad, que se cuiden, que entiendan que hay tiempo para todo. Ya no es lo mismo, aquí en redes sociales todos se enteran, hasta los mismos amigos te echan de cabeza, si quieres hacer una fiesta hazlo con tu gente de confianza y en tu casa”.
Directivo y empresario
No obstante, Osorno descartó haber quedado en la ruina por la situación tal y como se especuló en octubre del año pasado, en donde incluso tuvo que salir a desmentir la información a través de las redes sociales.
“Son cosas que uno vive, es figura pública y sabe contar las cosas cómo son. Reconozco que perdí la banda, pero no perdí 10 millones de dólares, no jugaba en el Barcelona o Real Madrid, son cosas de la vida privada en las que no se debe meter la gente, deben respetar un poco”.
De hecho, la vida ahora ha dado un giro de 180 grados para el canterano rojinegro que se desempeña como directivo de los Jaguares de Jalisco de la LBM, además de una faceta como empresario e impulsor de talento a través de diversas academias de futbol, todo esto en medio la pandemia que se vive a causa del covid-19.
“Uno analiza en qué estamos bien y estamos mal, necesitamos fortalecer a la familia, unirnos más, hacer cosas que nunca hacíamos, es un sacrificio para toda la gente, a veces se enfada uno en la casa, pero se debe tener cuidado porque uno tiene proyectos como el de las Academias, Las Leyendas del 99, los partidos que tenemos suspendidos, es algo complicado, hay que aguantar vara para que esperemos pronto se termine y disfrutar con familia y amigos”, finalizó.