Zague revela los grandes secretos del Bar-Bar, el paraíso de actrices y futbolistas

El ex jugador del América platicó quiénes asistían al lugar, quiénes fueron los primeros en ir a este extinto antro, así como la música que se escuchaba.

Zague revela los grandes secretos del Bar-Bar (Mexsport)
Ciudad de México /

No es un secreto a voces que el extinto Bar-Bar era un centro nocturno concurrido por futbolistas y artistas, el cual dejó de existir tras el lamentable atentado contra Salvador Cabañas, entonces jugador del América, quien estuvo a punto de perder la vida al recibir un balazo en la cabeza.

Este antro era el ideal para que acudieran los futbolistas, sobre todo los de las Águilas, pues de acuerdo al relato de Luis Roberto Alves Zague, dos figuras del cuadro azulcrema fueron los pioneros de este lugar, además reveló algunos secretos del Bar-Bar.

Los pioneros del Bar-Bar

Zague platicó en una de sus aventuras en Farsantes con Gloria del canal de YouTube de Luis García que fueron Efraín Herrera y Antonio Carlos Santos los primeros en ir a este centro nocturno, del cual eran asiduos, debido a que el dueño era aficionado del América.

La tradición del Bar-Bar empieza porque el dueño era americanista empedernido, él tenía mucha amistad con El Cuchillo Herrera y Antonio Carlos Santos, esos dos fueron los verdaderos pioneros futbolistas que iban al Bar-Bar, invitados constantemente por el dueño”.

Efraín Herrera y Antonio Carlos Santos (Mexsport / Imago7)

¿Por qué los futbolistas del América iban en domingo al Bar-Bar?

El delantero mexicano platicó que en aquel entonces las Águilas tenían partidos los domingos al mediodía, por lo que los lunes eran los días de descanso para ellos; ante esto, podían desvelarse sin problemas, además de que el Bar-Bar era el único lugar que estaba abierto ese día.

“Nosotros jugábamos los domingos a las 12, entonces el día libre del futbolista en ese entonces era lunes, el día que podías descansar, como entre semana supuestamente todos se portaban bien, no salimos, descansamos, éramos mucho más profesionales antes que hoy en día, ¿qué sucedía? Los lunes no había entrenamiento, entonces te podías desvelar tranquilamente, los domingos en cualquier rincón de este planeta, normalmente no hay muchos lugares donde te puedas salir, festejar, campeonar o convivir, charlar”, dijo entre risas mientras charlaba con Martinoli, Luis García y Álvaro López Sordo.

Un antro frecuentado por sobrecargos

Al inicio de este centro nocturno, Zague recuerda que iban varias mujeres aeromozas de las entonces dos aerolíneas más famosas de nuestro país, con quienes los jugadores entablaban pláticas.

“En aquella época me acuerdo que el Bar-Bar iban muchas azafatas de Aeroméxico y Mexicana, entonces era una visita frecuente, constante, obligada, porque el calendario de las azafatas es muy apretado”.

¿Quiénes iban al Bar-Bar?

Aunque al principio solo era frecuentado por futbolistas de Coapa, poco a poco se comenzó a correr la voz entre los jugadores, pues cuando equipos de otros estados venían a la capital aprovechaban para visitar este lugar.

“Después empezó a correr la voz en la selección que existía el Bar-Bar, entonces por ejemplo si Guadalajara venía a jugar a la capital contra los Pumas, Necaxa, Atlante, incluso el Toluca, automáticamente empezaron a darse cita en el Bar-Bar, entonces comenzó a ser casi casi la Federación Mexicana de Futbol”.

Otro de los equipos que se convirtió en ‘cliente frecuente’ fue el Puebla, pues al igual que el América jugaba los domingos al mediodía, por ello aprovechaban para venir a la Ciudad de México, incluso se llegaban a ver en los restaurantes aledaños al Bar-Bar para comer antes de llegar a este antro.

“Me acuerdo que en aquel entonces nuestros compañeros, amigos, rivales del Puebla, venían también porque jugaban domingo a las 12, coincidíamos en algunos restaurantes cercanos, aledaños al Bar-Bar, se extendía a las 7 y a las 8 comenzábamos a llegar (al Bar-Bar)”.

El sitio “no era un lugar amplio, lo más concurrido me gustaba estar siempre cerca del baño, ahí había mucho movimiento” y aunque “no era la gran maravilla, estaban las canciones de moda, sobre todo el rock en español, los Hombres G, Miguel Mateos, Soda Estéreo, abría con música pop y después se transformaba”, ‘en ¿un putero?’, preguntó Martinoli, a lo que Zague respondió “también, pero se transformaba en música en español”.

El ahora analista de TV Azteca rememoró que cuando fueron campeones en la Liga MX, gracias a Efraín Herrera y el Negro Santos, el dueño convivió con ellos.

“Sucedió que Cuchillo Herrera y Santos eran casi casi brothers, cuando fuimos campeones el señor del Bar-Bar estuvo con nosotros, cuando se le ganó a los Pumas y después contra Cruz Azul”.

Luis Hernández asistía al Bar-Bar (Mexsport)

De acuerdo a su plática, los jugadores de Pumas y Cruz Azul eran los que menos frecuentaban este lugar, entre broma dijeron que se debía a que no les pagaban; aunque fue claro al decir que no entraba cualquier futbolista.

Por su parte, algunos aficionados comenzaron a ir al Bar-Bar debido a que se enteraron de la presencia de jugadores, lo único bueno para ellos es que en ese entonces no existían los celulares.

Los aficionados se comenzaron a enterar de que iban los futbolistas, no había tanto el tema del celular, bueno, no existían, no molestaban”.

Bar-Bar: la ANDA y Federación Mexicana

Luis García, quien llegó a ir algunas veces, describió al Bar-Bar como una mezcla de la Asociación Nacional de Actores y la Federación Mexicana de Futbol, ya que poco a poco comenzaron a darse cita varias artistas a este lugar, además de los jugadores.

“Se empieza a correr la voz, las azafatas empezaron a salir de acción y comenzaron entrar las actrices, ese periodo que dominaban, porque empezó a haber relaciones con futbolistas, cuando comienzan a llegar las actrices, en los dos gremios empezaron a haber celos y el gremio de las actrices comenzó a pesar más”, explicó Zague.

A partir del minuto 26:21

Por último, Zague confesó que era un buen lugar, con un ambiente tranquilo, ya que nunca hubo pleitos; y aunque varios se iban hasta que cerraba el Bar-Bar a las 5 o 6 de la mañana, él siempre se iba antes.

Yo siempre tenía una regla, no que quedaba hasta que se prendiera la luz, a las 5 o 6, yo como a las 3 o 4 me iba”, finalizó.


ZZM

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