La llegada de Sergio Pérez a la Fórmula 1 causó diversos comentarios en el paddock de la categoría. Desde México se celebraba el que un piloto nacional arribara al Gran Circo para terminar la sequía de 30 años desde lo hecho por Héctor Rebaque; pero en los pasillos de Melbourne, Australia, los comentarios de la prensa especializada era que un nuevo piloto de pago había ingresado al equipo Sauber.
Nadie puede negar que el apoyo económico de Carlos Slim Domit fue clave para que Checo arribara a la máxima categoría, pero el 27 de marzo de 2011, fecha de su primer gran premio; el originario de Jalisco demostró en la pista por qué el millonario había creído en él.
“Me duelen un poco (esas opiniones) porque no tienen una idea de lo mucho que me ha costado estar en la Fórmula Uno, haber alcanzado el lugar donde estoy”, dijo el mexicano a La Afición, quien estuvo presente en esa primera carrera en la ciudad australiana, una competencia que, originalmente, debía ser la segunda del año pero que, ante los conflictos políticos en Baréin, sede real de la primera fecha, se convirtió en el inicio de temporada.
"Al final de cuentas no me preocupa lo que la gente diga, sé porque estoy acá, sé que influye tener el apoyo económico de las empresas mexicanas, pero eso es un resultado de mi trabajo".
En su primera clasificación se ubicó 13°, superando a hombres de experiencia como Paul di Resta, Rubens Barrichello o Nick Heidfeld, un resultado que hacía valer el trabajo físico y mental que él había hecho durante los meses previos desde que en octubre de 2010 se anunció su ascenso al Gran Circo.
“No estoy nervioso, estoy tranquilo y sé que he trabajado fuerte. La última semana me enfoqué en mi preparación física, así como en trabajo con el simulador. Creo que llego en un buen momento a mi primera competencia”. Con eso como antecedente, de inmediato se puso una meta: “Estar en los puntos es algo realista. Espero ganarle a mi compañero (Kamui Kobayashi). Va a ser un fin de semana complicado, en una pista que no conozco, estoy preparado para cualquier circunstancia. Sé que será muy difícil estar ahí en el primer fin de semana, pero será mi objetivo. Reconozco es bastante alta la meta, pero me exijo mucho siempre”.
Demostró su calidad
Sus esfuerzos rindieron frutos y en carrera avanzó hasta la séptima posición para sumar sus primeros puntos, pero un error en la configuración del alerón trasero de los dos Sauber (que incluía el del japonés Kamui Kobayashi) llevaron a una descalificación del mexicano.
“Una lástima la verdad lo que pasó con la descalificación, pero estoy contento con mi debut, creo que ha sido un gran día en mi carrera con mi primer gran premio dentro de la Fórmula 1”, dijo Pérez después de su desclasificación.
Su actuación en pista dejó satisfecho al suizo Peter Sauber, un viejo cazador de talentos con el historial de haber descubierto a hombres como Kimi Räikkönen o Felipe Massa. "Sergio es un buen piloto; porque fue la primera carrera de él y para un novato tomar riesgos no es sencillo. Me sorprendió su desempeño. Mi primera impresión fue positiva, yo lo seguí el año anterior dentro de la GP2 e hizo un buen trabajo".
Diez años después, Pérez estará disputando el mismo día que debutó su primera clasificación Red Bull Racing, un equipo con el que tendrá su gran oportunidad de demostrar su potencial, pero también de eliminar cualquier rastro de duda sobre si 120 meses después sigue siendo un piloto de paga, o si por fin todos han reconocido que 10 podios después y una victoria él se ha ganado su lugar dentro de la F1.
FCM