Ha sido uno de los casos más mediáticos en el mundo deportivo en este cierre de año. El nombre de Amir Nasr-Azadani se popularizó en todo el mundo, pero no en el mejor sentido. Las búsquedas de su nombre se intensificaron en internet, en donde aparece información junto con las palabras “futbolista iraní condenado a muerte”.
En medio de las fases finales de Qatar 2022, la noticia comenzó a trascender a nivel internacional y como pocas veces, causó una ola de mensajes de solidaridad en redes y presión social que quizá termine por servir para su salvación.
Amir es un futbolista iraní de 26 años que juega como defensa y lateral derecho. Comenzó en el profesionalismo en 2015, al jugar con el Rah Ahan de la Liga Profesional del Golfo Pérsico, hasta que firmó en 2016 con el Tractor Sazi, con quienes estuvo hasta noviembre desde 2017. Su último equipo fue el Iranjavan Bushehr, de Segunda División. A nivel nacional, solo ha tenido convocatorias con la selección Sub 16 de su país.
Su situación genera debate e indignación, mientras que su futuro está en duda.
¿Qué ha sucedido?
Lo primero que se informó es que Amir se enfrentaba a una posible ejecución por participar en las protestas que han invadido las calles de Irán en defensa de los derechos de las mujeres, las cuales se originaron a raíz del asesinato de Mahsa Amini, de 22 años, el cual ocurrió el pasado 16 de septiembre en Teherán debido a que la joven no llevaba correctamente su hiyab, por lo que fue detenida y agredida por la policía moral de la nación que vive bajo ese régimen, falleciendo dos días después por sus lesiones.
Sin embargo, las autoridades persas han informado que Amir ha sido acusado formalmente por ser miembro de un grupo armado responsable de asesinar a tres agentes de seguridad el 16 de noviembre y que ha confesado el crimen, aunado a que cuentan con grabaciones de seguridad como pruebas, aunque muchas veces se ha acusado que se tortura a los detenidos para obligarlos a dar confesiones, sean ciertas o no.
Si bien aseguran que no hay un veredicto en su contra, de acuerdo con el código penal de Irán, si se comprueba que disparó un arma de fuego la condena es justamente la ejecución vía ahorcamiento, un delito llamado moharebeh, que significa “enemistad con Dios”.
Todavía no hay juicio
Entre las numerosas celebridades que ejercieron presión en redes sociales están los cantantes Alejandro Sanz y Shakira, así como los futbolistas Rafa Márquez, Radamel Falcao y Marc Bartra, incluso la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro), que aseguró que sus integrantes están “conmocionados y asqueados por las noticias” y que se solidarizan con Amir, además de pedir “que se anule inmediatamente su castigo”.
Pero fue tras un mensaje del presidente de Colombia, Gustavo Petro, en el que pedía que “Irán no mate el futbol”, que llegó una nueva respuesta por parte del gobierno iraní a través de su embajada en el país sudamericano. “Falsa noticia sobre la sentencia de muerte del futbolista iraní”, señalaron en redes sociales, en donde además se criticó de gestarse un “guerra híbrida” en lo que es una “campaña de fake news”, ya que el juicio aún no se lleva a cabo.
Ante los antecedentes, hay altas posibilidades de que la República Islámica concrete la ejecución del futbolista.
CLAVES
Su origen
Nasr-Azadani nació el 7 de febrero de 1996 en Isfahán, ciudad ubicada a 406 kilómetros al sur de Teherán, la capital de Irán.
Antecedente
En 2020, ejecutaron a Navid Afakari, luchador de la disciplina greco-romana, acusado de asesinar a un guardia en protestas de 2018.
Otros detenidos
El karateca Mohamad Mehdi y el ciclista Eshragh Najafabadi también podrían ser condenados; se acusa de que forzaron sus confesiones.
MGC