Seis años se le fueron como agua al delantero Luis Suárez, quien este miércoles acudió a la Ciudad Deportiva del Barcelona para despedirse de sus compañeros y muy especialmente de uno de sus mejores amigos Lionel Messi, quien también estuvo a punto de dejar el club blaugrana en este mercado de verano; la tristeza fue tal en el goleador uruguayo, que no pudo evitar romper en llanto mientras abandonaba las instalaciones a las que llegó procedente del Liverpool en 2014.
Después de recoger todas sus pertenencias y a la espera de que se haga oficial su fichaje con el Atlético de Madrid, el delantero salió a bordo de su camioneta y las cámaras de televisión captaron cómo se limpiaba las lágrimas mientras saludaba a los aficionados que acudieron a despedirlo.
Luis Suárez renunció a la parte del sueldo que le restaba este año en el Barcelona; a cambio, el club le otorgó su carta libertad para que pueda firmar con los colchoneros sin ningún problema.
El Atlético de Madrid recibirá al Barcelona en la jornada 10 del actual certamen; será hasta el 22 de noviembre cuando Luis Suárez vuelva a ver a sus compañeros en un terreno de juego, aunque en esta ocasión será como rivales.