El Columbus Crew ganó el sábado 2-1 al Los Angeles FC (LAFC) y alzó su tercer trofeo de la liga norteamericana (MLS) en una final en que el colombiano Juan Camilo 'Cucho' Hernández anotó un gol y fue elegido MVP.
Columbus se adelantó con las dianas de 'Cucho', de penalti en el minuto 33, y del ghanés Yaw Yeboah en el 37 y el gabonés Denis Bouanga recortó para LAFC en el 74 en esta final disputada bajo una intensa lluvia en el Lower.com Field (Columbus, Ohio).
El LAFC se quedó sin revalidar el título, un logro que solo han conseguido tres franquicias en la MLS, en el posible partido de despedida de su emblemático capitán Carlos Vela y del italiano Giorgio Chiellini.
Tras los triunfos en 2008 y 2020, Columbus Crew salió campeón de la MLS en el año en que los focos del mundo futbolístico se posaron hacia este campeonato con la llegada en julio de Lionel Messi.
Aunque lideró al Inter Miami al título de la Leagues Cup, el astro argentino solo disputó seis jornadas de MLS y no le alcanzó el tiempo para aupar a su equipo hasta los playoffs.
Columbus, que se quedó fuera de las eliminatorias el curso pasado, resurgió esta campaña de la mano de 'Cucho' Hernández y su socio ofensivo, el uruguayo Diego Rossi, exjugador del LAFC.
"Fue un poco difícil para mí y mi familia venir de Inglaterra a Estados Unidos. Esto significa que todo el esfuerzo y la decisión que tomamos fue la correcta. Ahora quiero disfrutarlo", dijo a Apple TV el atacante pereirano, por quien Columbus abonó 10 millones de dólares en 2022 al Watford inglés.
Los locales fueron claros dominadores del choque y arruinaron los deseos del LAFC de emular a su vecino LA Galaxy, el último equipo en revalidar el título (2011-2012) desde el inicio de la MLS en 1996.
El equipo angelino alineó hasta ocho titulares de la final del año pasado pero una de las ausencias fue el ya retirado Gareth Bale, héroe de aquel partido con su gol en el descuento de la prórroga que forzaba los penales.
Pese a su mayor experiencia, el LAFC se vio superado en la primera mitad por el ambicioso planteamiento de Columbus y la olla a presión que creó su afición en las gradas, completamente llenas con 20.802 espectadores.
El dominio de los locales rindió sus frutos en una acción en el área en la que Rossi trató de controlar una pelota que después rebotó en el pecho del defensa ecuatoriano Diego Palacios y luego en su brazo.
El árbitro concedió el penalti y 'Cucho' Hernández colocó el 1-0 engañando al canadiense Maxime Crépeau.
"Fue el penal en el que más nervios tuve", reconoció el colombiano. "Pero para eso trabajo todos los días, para esta clase de momentos. Confié en mí todo el año, este era mi momento y lo aproveché. Así es el fútbol".
El internacional colombiano marcó su 21º gol en 32 partidos de esta campaña, en la que asumió el liderazgo ofensivo de Columbus tras la partida al futbol saudita del argentino Lucas Zelarayán.
Hernández, de 24 años, ha sido decisivo en estos playoffs anotando o asistiendo en los seis juegos de eliminatorias.
Sin que el LAFC se recuperara del golpe, el defensa danés Malte Amundsen sorprendió a la zaga angelina con un envío a su espalda para la irrupción de Yaw Yeboah, que definió ante Crépeau con un elegante disparo con el exterior.
El vigente campeón se fue al descanso con apenas un 31% de posesión y un solo disparo a puerta pero tampoco pudo revertir esta dinámica en la segunda mitad.
Con cuatro minutos de juego Rossi asistió para otro peligroso remate de 'Cucho' desde fuera del área.
El LAFC seguía aferrándose a su contragolpe y en el 57 Carlos Vela tuvo su única gran oportunidad cuando el central francés Rudy Camacho falló un despeje y le dejó en bandeja un remate de volea que el mexicano envió a las manos del arquero Patrick Schulte.
Los visitantes dieron emoción a la final al descontar el marcador de la mano de su goleador gabonés Denis Bouanga, el máximo artillero del año en la MLS.
El defensa colombiano Jesús Murillo le robó la pelota a Rossi y llegó hasta el área, donde centró para Vela. El mexicano no llegó a rematar y el balón le cayó en el segundo palo a Bouanga, que remachó ante Schulte.
El gol dio esperanzas al LAFC pero sus atacantes no llegaron a poner en peligro el triunfo de los locales, en un partido que podría ser el último en el equipo de Vela y Chiellini, que acaban sus contratos en Los Ángeles.
MGC