Una interesante confesión ha rondado en los últimos días en redes sociales, pue Flor Amargo, artista mexicana popular confesó que no siempre tuvo en mente ser cantante, confesó que cuando era niña soñó con jugar futbol.
Estas palabras se escucharon en la entrevista de El minuto que cambió mi destino, entrevistas realizadas por Gustavo Adolfo Infante, indagando en el pasado de las estrellas que se encuentran activas en la actualidad. Esta ocasión fue el turno de Flor, quien abordó sobre su pasado futbolero.
Este sueño al parecer un familiar lo cortó, pues cuenta que un día que su tío la encontró jugando le hizo un comentario que le hizo avergonzarse y alejarse para siempre de este deporte, inclinándose por completo a lo que ahora ejerce, la música.
“Yo quería jugar futbol, era futbolera. El futbol era todo en mi. Fue un golpe para mi dejar el futbol y saber que nunca iba a ser futbolista”, contó en una entrevista con Gustavo Adolfo.
La cantante narró que dejar el futbol fue algo muy fuerte para ella, sobre todo porque se vio obligada a abandonarlo por las críticas que vivió. Actualmente su fama ha surgido por otro de sus talento su gran destreza para tocar el piano, contando sus primeros acercamientos con la música y específicamente con este instrumento,“el piano fue mi compañero”, dijo.
Cuando murió su abuelo le dejó un tocadiscos que recuerda con gran cariño, “se va el futbol y se quedó el piano, y se quedó la música, y se quedaron los discos y se quedaron los cassettes”.
Flor Amargo es popular en redes sociales gracias a videos de ella en donde toca el piano en diferentes lugares del mundo, como en algunas explanadas, estaciones del metro y dentro de los vagones de algún tren. Estos videos lograron miles de vistas en su página de Facebook y en las diferentes redes sociales.
A lo mejor Flor dejó un sueño que tenía dentro del deporte femenil, pero sin duda está cumpliendo otro dentro de la música, contando ya con canciones dentro de plataformas digitales como Spotify, además de tener giras alrededor del país y fuera de él.
DAO