Se jugaban los octavos de final de la Copa Argentina, entre Barracas Central y Gimnasia y Esgrima en el Estadio Ciudad de Lanús, el cotejo terminó con triunfo para los visitantes (1-0) con gol del jugador argentino Benjamín Domínguez.
Lamentablemente al término del cotejo, jugadores de ambos equipos se vieron involucrados en una batalla campal bastante grave.
¿Por qué empezó la campal en la Copa Argentina?
Todo se originó cuando el árbitro Darío Herrera, quien había expulsado sobre la hora a Juan Cortazzo de Gimnasia y Esgrima, pitó el final del encuentro. En ese momento, hubo una discusión entre Leonardo Morales y Jhonatan Candia; a ellos se le sumaron dos jugadores más, Yonathan Cabral y Gustavo Canto.
Sin embargo, hubo golpes entre Cabral y Candia, lo que terminó generando una batalla campal entre los dos equipos, incluyendo parte de los staff. Fue tan grave la campal que hubo patadas y se pudo notar a jugadores corriendo en varios sectores de la cancha.
Los entrenadores intentaron frenar los actos violentos de sus respectivos jugadores, pero cuando todo parecía calmarse, volvían a aparecer las peleas.
El panorama fue de descontrol debido a que llegó un momento en el que fueron varios jugadores los involucrados, se sumaron algunos suplentes que también participaron en la gresca. Las patadas y los golpes fueron escenas repetidas por todo el terreno de juego.
A todo esto, se le sumó un incidente más grave cuando los aficionados de Barracas Central se metieron al campo de juego, debido a que las puertas del estadio estaban cerradas. En medio de proyectiles y sin tantos elementos de la policía, el público de Central habría reclamado que los dejaran salir del estadio, pero quince minutos antes de que terminara el partido les habían avisado al público que los que iban a salir primero eran los fans de Gimnasia.
Fueron varios minutos en los que la tensión se apoderó de la parcialidad de Barracas, que luego de dialogar con la policía, decidieron volver a la tribuna. Acto seguido, una vez que se abrieron las puertas, la gente del conjunto porteño se retiró del recinto.
CGHR