No hay duda que el nuevo receptor del Balón de Oro ha sido un jugador que siempre ha tenido que luchar contra al adversidad. Desde vivir a la sombra de Cristiano Ronaldo, ser criticado por su nivel de juego y hasta superar el sobrepeso que marcó los inicios de su carrera. Hoy con 34 años conquista el más prestigioso galardón dentro del futbol y lo hace en la mejor forma de su vida.
Karim Benzema nació el 19 de diciembre de 1987 en Lyon, Francia. Hijo de padres argelino migrantes, fue el sexto de nueve hijos. Cuando era niño estudiante en un colegio católico comenzó a sufrir bullying y no solo por el origen de su familia y su práctica musulmana, si no por su sobrepeso. Fueron sus hermanos quienes lo ayudaron a sobrellevar su complicada infancia, pero eventualmente comenzó a caer en pandillas en el conflictivo barrio de Bron.
De pronto la figura de su padre, Hafid, conocido como un hombre estricto, tomó más relevancia. Lo sacó del mundo de la delincuencia e incluso le puso un régimen alimenticio para quitarle el sobrepeso con mejores hábitos. Ya desde los ocho años jugaba futbol con frecuencia, por lo mismo la motivación del deporte también lo ayudó a superar esta etapa y logró ingresar a las inferiores del club local.
Con el Real Madrid, club al que llegó en 2009, también tuvo que seguir un régimen de exigencia máxima. En algún punto el antiguo seleccionador francés Laurent blanc, agradeció a su club que lograra ponerlo de vuelta en forma porque tuvo problemas de sobrepeso en concentraciones de Les Bleus. Afortunadamente aprendió de los errores, que si influían en su rendimiento. Hoy aún sigue una dieta estricta y por lo mismo el Real Madrid se siente orgulloso de la seriedad con la que ha llevado Benzema su tendencia a engordar.
JR