Desde que se supo que Lionel Messi dejaría el París Saint Germain y ficharía por el Inter de Miami, la expectación por ver a uno de los mejores jugadores de la historia creció en un país donde el futbol no es el deporte predilecto, se contaron los días para ver su presentación.
A Leo lo fueron a ver unos instantes miles de personas, unos días después de haber aterrizado en Miami, los precios para el partido contra Cruz Azul en la Leagues Cup se fueron hasta los cielos, en sitios de reventa alcanzaron hasta los 10 mil dólares.
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De golpe y porrazo el Inter de Miami entró en la mira de la prensa deportiva de Estados Unidos y de todo el mundo. Corresponsales de Europa y Argentina se trasladaron para contar los detalles del día a día del rosarino, horas de transmisión en su país, ríos de tinta en periódicos, portales de internet llevando los detalles en tiempo real, trending topic en redes sociales… Messi aterrizó y cambió la historia de la MLS.
Espectáculo, de la mano de Lionel Messi
Ya se sabía que Leo sería un imán de taquilla, el aficionado latino que vive en Estados Unidos se trasladó de un estado a otro para verle, sacó los dólares y pagó por estar presente en el debut del actual capitán campeón del mundo y Balón de Oro.
Llegó el día y el rival fue un equipo mexicano. El arranque de la Leagues Cup tuvo como gran atractivo la presencia de Leo, con Cruz Azul haciendo los honores y con personalidades como LeBron James, Serena Williams, Kim Kardashian o Marc Anthony en los sitios VIP del DRV PNK Stadium, con sus celulares retratando su ingreso al campo de juego en el segundo tiempo. Un momento histórico.
Y sobre el terreno de juego sus primeras pulsaciones ratificaron que se trata de un animal competitivo, un jugador al que le quedan años de buen nivel, que pasaporte marca 36 años, pero que la pelota no le pregunta por el acta de nacimiento.
Los cinco goles que ha marcado, con dos dobletes incluidos, evidencian el estado futbolístico que vive. Ha marcado un gol cada 40 minutos. Además, las entradas del Inter (con un promedio de 20 mil 147 aficionados por juego) han sido de lo más estable de la competición. Hasta ahí todo bien.
Lionel Messi, consentido por árbitros
Lo que no ha gustado de la llegada de Messi a la MLS es que su figura ha eclipsado a los árbitros, es la realidad, parece que los silbantes lo tienen idolatrado, se le está cuidando en demasía y se le ha favorecido, porque ha habido acciones que con otros jugadores no se pitarían como faltas.
La muestra más clara se dio en su debut, una acción en la que Carlos Salcedo salió a cortar el balón y hubo un contacto con Leo, pero no una falta, pues el árbitro hondureño, Said Martínez, la marcó y de ahí nació el gol del triunfo del Inter, y casi le concede un penal que no era.
Contra el Atlanta algo similar, acciones que acabaron en faltas muy baratas, pero el acabose llegó ante el Orlando City. Un juego más áspero, le pegaron y pegó, incluso se llevó la amarilla, pero en alguna acción estrelló el balón en el pecho de un contrario y reclamó mano. El árbitro salvadoreño, Iván Barton, se la concedió.
Al final del partido, Óscar Pareja, entrenador del Orlando City, dejó un mensaje que muchos empiezan a pensar. “Hay una doble amarilla de Leo, a mí no me importa que sea él, es doble amarilla y debe ser medido igual”. El huracán Leo Messi ha pegado fuerte en Florida, para bien y para la polémica. Lo único que se reclama es justicia, Messi no necesita que se le regale nada.
MGC