El amistoso de fecha FIFA entre Irán y Bolivia fue histórico y no por el resultado de 2-1 a favor de los islámicos, sino porque después de 40 años la mujer pudo asistir a un encuentro de futbol, luego de que el presidente Hassan Rohani levantó la suspensión, pero las críticas no se hicieron esperar al ser considerada una acción que lleva al 'pecado'.
El Estadio Azadi de Teherán fue testigo de cómo un centenar de mujeres pudieron disfrutar del futbol, un deporte catalogado para hombres, el cual no fue bien visto por todos.
"Estoy en desacuerdo con la presencia de estas mujeres en el estadio Azadi. Somos un Estado islámico, somos musulmanes. Que una mujer acuda al estadio y se encuentre ante hombres medio desnudos con la ropa de deporte, eso lleva al pecado", señaló el fiscal general, Mohammad Jafar Montazéri.
Desde el triunfo de la revolución islámica en 1979, las mujeres tienen prohibido el acceso al estadio en los partidos de futbol masculinos, oficialmente para protegerlas de acciones groseras de los hombres.
En junio pasado este mismo estadio fue abierto a hombres y mujeres para que pudieran disfrutar del partido entre Irán y Portugal del Mundial de Rusia 2018, a través de las pantallas del inmueble. Y en el Irán vs. España de la misma Copa del Mundo, una iraní pudo entrar por primera vez en su vida a un partido de futbol.