Pelé fue el mejor jugador de su época de eso no hay duda, desde niño deslumbró con su capacidad, apenas era un futbolista en ciernes cuando fue incluido en la nómina de la selección brasileña que disputó la Copa del Mundo de Suecia 1958, en la que anotó 6 goles en los cuatro partidos que disputó.
Era un niño cuando ya había alcanzado la máxima gloria a la que puede aspirar cualquier futbolista en cualquier época. En ese año el mundo conoció a Pelé, estrella que murió hoy a los 82 años.
Pareciera ilógico que un jugador que fue despuntando con el paso de los años, que brillaba en el máximo teatro del futbol no llamara la atención de los clubes europeos, no hacerle una propuesta era privarse de un talento natural y de un jugador explosivo, capaz de marcar la diferencia en un partido.
Pero O Rei sí tuvo ofertas, y no fueron de equipos cualquiera, su clase era conocida y grandes potencias futbolísticas tocaron a su puerta, el mismo Pelé llegó a confesar los equipos que en su momento hicieron lo posible por seducirlo: “Tuve ofertas para jugar en el Real Madrid, el AC Milán y el Manchester United”, nada más y nada menos.
Pero qué llevó al astro a decir que no, por qué cerró cualquier posibilidad a que en Europa pudieran apreciar sus condiciones. “Santos estaba jugando bien, yo estaba bien y no quería marcharme”, reveló en su momento. Sí, a O Rei le pudo más el amor por su país, su sentido de pertenencia, pues era, antes que jugador, un amante del Santos de Brasil, su Santos, un club que llevaba en el alma.
En el libro Pelé, porque el futbol importa, el autor Brian Winter, recoge de manera más explícita esas razones personales que tuvo Pelé para no tomar un vuelo al viejo continente. “Nunca me planteé seriamente salir de Brasil. Me encantaba el arroz con frijoles que preparaba mi mamá, me sentía cómodo y muy feliz en Brasil. Mis padres vivían al lado de mi casa, la temperatura era siempre de 25 grados y tenía la playa al lado. ¿Qué más podía pedir?”.
Cuentan que el conjunto merengue lo intentó hasta en tres ocasiones, que fue el mismo presidente Santiago Bernabéu quien lo buscó directamente, su respuesta siempre fue educada, porque eso siempre le distinguió, pero en el mismo número de ocasiones la respuesta fue la misma: "No", por su amor eterno al Santos de Brasil.
Entonces, por qué sí jugó en Estados Unidos y no en Europa, porque cuando ya estaba retirado y con 35 años, tuvo problemas económicos, y a esa edad hubo clubes que le intentaron fichar, pero fueron los estadunidenses los que lograron convencerle, y en una entrevista con el diario inglés The Telegraph, él mismo explicó dicha situación.
“Siempre me preguntan por qué nunca jugué en Europa. Me sentía muy bien en Brasil y el Santos era el equipo de mi vida. Únicamente en el final de mi carrera acepté jugar en el Cosmos en una ciudad como Nueva York, como una experiencia y para promover el futbol en el país. Además, hicimos clínicas para niños y aprendí inglés, si no nunca… hubiese salido de Brasil”.
Sí Pelé nunca jugó en Europa, no le hizo falta, a los países de esa zona geográfica los conquistó con su futbol, el cual admiraron en los Mundiales, llegó por la televisión a miles de personas que solo tuvieron la utopía de verle con sus colores.
DAO