La Real Sociedad convenció en su triunfo ante el Leganés, que no pudo celebrar su partido número 100 en Primera División al caer ante un equipo local muy ofensivo que contó con un soberbio Mikel Oyarzabal, con dos goles, secundado por el brasileño Willian José para acercar claramente a los guipuzcoanos a Europa.
El once madrileño se plantó muy bien en Anoeta, con una línea defensiva de cinco hombres que siempre complica las cosas a la Real, y estirándose cuando la ocasión lo requería para poner de los nervios a la afición realista que había acudido esperanzado en un triunfo caro esta temporada en los partidos en San Sebastián.
La Real dominó de inicio pero los contraataques de su rival llevaban un peligro enorme, como el que sufrió el cuadro vasco a los quince minutos de juego en un cabezazo al poste de Bustinza, a centro de Juanfran, o en una acción casi seguida de uno contra uno ante Rulli de En Nesyri que el marroquí no acertó a resolver.
Le entró el miedo a una Real que comenzó a echarse a atrás y a dejar el mando del partido al conjunto de Mauricio Pellegrino, al que le salía casi todo menos el gol, algo no sorprendente en un equipo que es de los menos realizadores fuera de casa.
El encuentro entraría en el último tramo del primer tiempo en unas alternativas bonitas para el espectador, pero a la afición local no le gusta esa película porque normalmente suele terminar mal para sus intereses, aunque en esta oportunidad fue su equipo el que tuvo la más clara previa al descanso con Merino y su remate desde el área pequeña estrellado en el cuerpo de Cuéllar.
Empezó fuerte la Real el segundo tiempo y gozó a los dos minutos de la reanudación de una gran ocasión del debutante Alex Sola, de 19 años, en un disparo intencionado que no llegó por muy poco a su objetivo y que puso de los nervios a los del Pellegrino.
Peor se le pondrían las cosas al técnico argentino, ya que en la siguiente jugada el enésimo centro del belga Januzaj encontraba por fin el objetivo buscado y Mikel Oyarzabal conectaba con su cabeza para batir de remate picado la portería del cuadro madrileño.
La tumba para los intereses del equipo pepinero llegaría instantes después y con el mismo protagonista, un Oyarzabal pletórico que culminó, esta vez con el pie, una jugada preciosa de la Real, en la mejor acción combinativa del partido que levantó al público de Anoeta.
No hubo opción para la remontada del Leganés pues casi todas sus llegadas de peligro las abortaría con acierto Gero Rulli y Willian José acudió a su cita con el gol en los partidos de Anoeta para rubricar con otro cabezazo un buen partido de la Real Sociedad.