No es el futbol espectacular que ha prometido Pedro Caixinha, y a duras penas tiene rasgos del práctico que ejecutó el torneo pasado, pero en este momento, lo que más le importa a Cruz Azul es ganar como sea. Y sí, se impuso por la mínima a diferencia a Tijuana para empezar a nivelar su situación en la Liga, con dos triunfos seguidos que apagan el nerviosismo de las primeras jornadas. Eso es lo que cuenta.
En este partido quedó comprobado que tan importante es tener una delantera efectiva como un portero que salve partidos. Y Cruz Azul lo sigue teniendo en José de Jesús Corona, quien ha cumplido 38 años, pero sigue tan solvente y seguro como una década atrás.
Y es que Chuy se equivoca poco y salva mucho. Incluso, en estos casi 10 años que lleva en La Máquina no hay torneo en el que no sea figura del equipo. Fue fundamental para que el conjunto celeste se quedara con los tres puntos.
Porque el partido contra Tijuana no fue nada sencillo, así como Cruz Azul tuvo las suyas, el visitante también generó las propias. Aunque hay que remarcarlo, al equipo de Caixinha le está costando mucho encontrar la portería rival. Sí, tuvo varias, pero solo metió una y de penal, y de nuevo fue Elías Hernández el único que anota en la Liga para este equipo.
Porque antes de que llegara la falta de Lajud sobre Jonathan Rodríguez en el área –ratificada por el VAR–, el mismo Cabecita había desaprovechado un mano a mano con el portero. Pero en la pena máxima Elías Hernández no perdonó, con un tiro certero adelantó a La Máquina al minuto 24.
Después vino el factor Corona, quien apareció en tres ocasiones para mantener el cero en su puerta. Primero, en un disparo lejano de Fabián Castillo, casi a su posición y tal vez la más fácil de todas; luego Gustavo Bou protagonizó una descolgada que culminó con un disparo cruzado y raso que Chuy sacó tendiéndose de gran manera; por último, de nuevo Castillo, haciendo el recorrido hacia el centro y disparando de derecha pegado al poste, pero el portero celeste se estiró para mandar a tiro de esquina.
Jesús Corona cumplió su parte, no así Martín Cauteruccio, quien en un despeje del mismo portero quedó mano a mano contra Lajud, con espacio y tiempo, pero falló pavorosamente al estrellarle el balón en su humanidad. Así se fue el partido al descanso, con una Máquina que apenas ganaba con lo justo.
Y para el complemento las cosas siguieron el mismo curso, pero con algunos contratiempos; por ejemplo, Caixinha quemó su primer cambio por una lesión de Adrián Aldrete, metiendo a José Madueña; luego, en lo anecdótico quedó la expulsión del portugués Stephen Eustáquio, quien apenas llevaba tres minutos en la cancha; sin embargo, el VAR salvó su presentación en la Liga, pues el silbante Óscar Mejía, luego de consultar la toma, decidió solo amonestarlo.
Así se fue consumiendo el tiempo. La Máquina por más que buscó el segundo tanto que le diera tranquilidad, no lo halló. Y Xolos tuvo una última que se quedó ahogada casi en la línea de gol. Pero está claro que su delantera no anda fina y como dato adicional, dos de los tres tantos que lleva en el torneo han sido de penal y ninguno de su centro delantero, todos de Elías Hernández.
No es el equipo abrumador del semestre pasado, pero de a poco está recuperando su practicidad, y como suele decirse, es mejor trabajar con tres puntos en la bolsa que con la presión de las derrotas.
Además, en lo que reencuentra su juego, al menos tiene la garantía que atrás tiene un portero confiable que cada vez que se le exige suele aparecer para bien. Sí, a sus 38 años de edad, José de Jesús Corona sigue siendo, en gran medida, el salvador de este Cruz Azul cuando las cosas tardan mucho en arrancar.