Una de las postales recurrentes en el estadio Hidalgo previo a los partidos del Pachuca es la llegada de su afición mayormente en un ambiente familiar, no faltan los amigos que eligieron como plan de fin de semana ir al futbol y desde luego la barra ultra tuza, que pone el ambiente antes de que suene el silbatazo inicial.
Entre la afición, una mujer que es conocida y reconocida por futbolistas y aficionados, es la señora María Calderón Salinas “La Abuelita de los Tuzos”.
¿Desde cuándo inició su afición por los Tuzos? Desde hace 19 años y sólo falté al estadio en este partido contra rayados por cuestiones de salud.
“Me hice aficionada desde que Pachuca le ganó a las águilas “creídas” (risas) no estuve en el estadio pero cuando vi a la porra de los tuzos estaba disfrutando del campeonato en el reloj, me metí a ver y a disfrutar el ambiente y dije soy de aquí.”
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La señora María tiene su lugar establecido en la grada norte cerca del túnel y recuerda con Cariño a Miguel Calero “El me dio mi primera playera, yo le decía que él me gustaba para que fuera mi amante y desde ahí nos llevamos muy bien, primero me dio una playera naranja y después una roja con negro y desde ahí todos los porteros me han dado su playera”.
Gracias a su ubicación cerca de los jugadores, la señora María se vuelve una extensión para decirles de todo ¿Qué les dice a los jugadores cuando los tiene cerca? Cuando pasan los jugadores visitantes, comienzo a saludarlos y les digo salúdenme, pero salúdenme a su madre, pero es parte de la diversión del juego. A los locales y más al portero cuando deja entrar muchos goles les reclamo y les digo para eso están buenos, para cobrar, que pongan a uno más bueno.
Durante estos 19 años, los jugadores del primer equipo le conocen, ya que, sin buscarlo, “La abuelita de los Tuzos” les ayuda a mantener su ego a raya. “Una ocasión Franco Jara se acercó a saludarme, al principio era muy payasito y no saludaba a los niños, hasta que un día le dije ¿Qué no fuiste niño?, a mi si me quieres saludar, salúdame y sino, le dije lo mismo que los jugadores visitantes y desde ahí Jara saludaba a todos y después a mí, me estimaba y me dio su playera.”
Recuerda con humor que cuando llegó Javier “La Chofis” López se acercó a saludarla y el joven futbolista le pidió que le mentara la madre como lo hacía cuando jugaba para chivas y también le regalo su playera, ya tiene todas las playeras de todo el plantel actual.
El estadio Hidalgo ha sido escenario de goles significativos, la señora María, tuvo un lugar privilegiado para ver el agónico empate de Pachuca a Cruz Azul con gol del Conejo Pérez en el Clausura 2017, esa noche el portero fue ovacionado por todos, la única que le habló con voz de mando para pedirle su playera, fue “La Abuelita de los Tuzos”.
“Conejo me dio tres playeras y una de cuando estuvo en Cruz Azul”, conserva una buena relación con los ex futbolistas y miembros del club, incluso reconoce que durante el tiempo que estuvo enferma de covid, el señor Gil, Christian “Chaco” Jiménez, Jorge "El Burrito" Hernández y Oscar “El Conejo” Pérez le ayudaron a salir adelante.
Recuerda con mucho cariño a Érik “Guti” Gutiérrez e Hirving “El Chucky” Lozano, “El Chucky siempre fue muy amable, pero nunca me dio su playera, pero me interesó más su amistad, lo mismo con el Guti, tengo su playera y su amistad, los tengo presentes en mi mente, como a todos.”
Al estar en el ambiente, no está exenta de recibir ofensas por parte de otros aficionados, pero reconoce que la barra la cuida. Pero todo queda en el ambiente del juego, tan es así que hoy también lleva un trato agradable con Ricardo “El Tuca” Ferreti, los porteros Nahuel Guzmán y Carlos Acevedo y Miguel Layún.
“Todos estos recuerdos me los llevo en el corazón y me los voy a llevar a la tumba”.