La jornada 8 del Apertura 2019 ofrece, en su marco, un duelo más entre el Cruz Azul y las Chivas, dos de los equipos con mayor convocatoria en el balompié de nuestro país. Y, también, un enfrentamiento más entre Pedro Caixinha y Tomás Boy.
Este choque, el cual se remonta hasta el 2013, año en el que el portugués llegó al futbol mexicano, siempre se ha llenado de polémica, sobre todo después de la bronca que protagonizaron los estrategas en la liguilla de ese certamen.
Dicho altercado ocurrió al finalizar el duelo de vuelta de los Cuartos de Final, serie en donde Santos eliminó al Atlas, por un marcador global de 1-3, cuando Tomás Boy –en aquel momento estratega de los Zorros- agredió a Caixinha (técnico de los Guerreros), esto cuando el portugués intentó saludarse con ‘El Jefe’.
La bronca, aparentemente, surgió cuando Darwin Quintero festejó el tanto con el que los de la Comarca sellaron su pase a Semifinales, tanto que –a su vez- fue festejado de manera excesiva por Oswaldo Sánchez, arquero en aquel momento del Santos. Lo anterior generó molestia entre los aficionado y, también, a Tomás Boy.
“Yo estaba en mi lugar, iba a saludar como siempre. Pero sabes qué, me gusta la gente con carácter. Son cosas del futbol. Estamos aquí para hablar del partido. Eso fue después del silbatazo final y no merece la pena”, dijo Caixinha al finalizar el encuentro.
Ahora, un nuevo capítulo de esta rivalidad se escribirá y, tal parece, será en circunstancias sumamente delicadas para ambos estrategas. En el caso de Boy, una derrota ante La Máquina podría poner fin a su era al frente del banquillo del Rebaño.
Por su parte, en el supuesto de que Caixinha no logre un resultado favorable, quizá este no represente el fin de su gestión al frente del Cruz Azul, aunque podría su cuenta regresiva comenzaría a caminar.