Uno de los máximos ídolos del Atlante es el ex portero Rafael Puente Suárez, mejor conocido como el Wama, por su parecido con el protagonista de la historieta mexicana, Wama, el hijo de la jungla. En 1974, Rafa, quien le quitó la titularidad a Raúl Orvañanos con los azulgranas, fue traspasado al América donde permaneció por un par de años donde formó parte del plantel que obtuvo el título de Liga en la temporada 1975-76. El ahora analista deportivo fue suplente de Francisco Castrejón.
Puente Suárez tuvo un retiro prematuro debido a una lesión en la rodilla, así que en 1976 colgó los guantes con la playera de las Águilas.
El Wama recordó en el canal de YouTube del periodista Antonio de Valdés cómo fue su venta del Atlante al América, además de señalar que le pagaban más en los Potros de Hierro que en las Águilas.
“Don Fernando quien tenía una excelente relación con Emilio (Azcárraga) hizo la operación siempre fue muy disfrazada. En aquel entonces a raíz de la venta de Enrique Borja de Pumas a América, que incluso algunos titulares de periódicos decían que lo habían vendido como un costal de papas y que había un cierto disgusto. El entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz por orden presidencial que se cumplió como un decreto en el que quedó asentado que el jugador tenía el 25% de la carta de transferencia más el 5% por año de antigüedad hasta llegar al 50%, mencionó Puente Suárez, quien agregó:
“Había interés por Marcos Rivas un referente del Atlante, conocido como el Once Puestos o el Mugrosito. Don Fernando hace la operación, los dos como en paquete y entonces no se supo cuál era la operación de acuerdo al precio de cada uno y entonces hubo diferencias. Cuando llegamos al América también hubo diferencias en lo que se refería al sueldo, no sé el de Marcos. Cuando llego al América me ofreció después de haberme comprado menos de lo que yo ganaba en Atlante. Se hizo una gira y yo no había firmado, cuando regresamos llegamos y firmamos porque se acordó el sueldo directamente con Don Guillermo Cañedo”.
Asimismo, Rafa Puente reconoció que dejar al conjunto azulgrana fue uno de los golpes más duros en su carrera profesional.
“Era increíble que salieras de Atlante para llegar al América porque te ofrece algo con lo soñabas como jugador del Atlante no por irse del Atlante. Fue de los golpes más fuertes de los que yo recibí. Cuando salí consciente de que me habían vendido y que formaba parte del América, me ganó la tristeza y salí llorando”.
ZZM