El agua, no sólo es imprescindible para dar vida, también lo es para la práctica de diversos deportes, tales como la natación, waterpolo, clavados, entre otros tantos; sin embargo, hay algunas disciplinas que destacan por su espectacularidad y en el Día Mundial del Agua te las presentamos.
Wakeboarding
También es conocido como esquí acuático y consiste en deslizarse sobre el agua encima de una tabla mientras se es arrastrado por una cuerda tirada por una lancha o moto acuática.
En México es regulado por la Federación Mexicana de Esquí y Wakeboard (FEMEW) y el principal lugar para practicarlo es Acapulco, Guerrero, aunque también Jalisco, Monterrey y Querétaro son sedes de eventos y escuelas.
Surf
Practicado desde hace más de 500 años en las Islas Polinesias, el Surf consiste en deslizarse y maniobrar en las olas encima de una tabla; el deporte tiene diferentes categorías según el tamaño de la tabla o bien, en cuanto al tipo de olas.
La playa San Miguel, en Ensenada, Baja California, es considerada la cuna de este deporte en México, además, ahí se llevan a cabo diversas competencias anuales.
Algunas otras opciones son la playa Zicatela en Puerto Escondido, Oaxaca; Punta Mita en Nayarit; la Bahía del Escorpión en San Juanico, Baja California Sur y Todos Santos en Baja California Sur.
Cliff Diving
Esta variante de los clavados fue popularizada por la empresa Red Bull, impulsora de diversos deportes extremos, y consiste en lanzarse al agua desde una altura de 27 metros.
La gira se lleva a cabo alrededor de todo el mundo y cada año entregan un campeonato.
México tiene a un par de representantes en este deporte, aunque Jonathan Paredes ha sido de los más exitosos, pues en la temporada 2016, se quedó con el segundo lugar del Campeonato Mundial.
Kayak
El kayak nació para solo un tripulante, que debe colocarse sentado en dirección al avance y propulsa la embarcación mediante un remo de hoja doble.
La embarcación es cerrada, dejando abierto solo el espacio para el palista.
Se dice que en México fueron utilizados por los mayas para comercializar con distintas culturas centroamericanas y hoy en día son instrumento de exóticos viajes por el Mar de Cortés y el Caribe mexicano.
También es practicado para hacer descenso en los ríos mexicanos que cuentan con rápidos, tales como el Río Amacuzac en Guerrero, el Río Filo Bobos en Veracruz y el Río Santa María en San Luis Potosí.