Draego es el significado de resiliencia, pasó de ser rechazado por diversas empresas de lucha libre a pertenecer a una de las más cotizadas de México, el Consejo Mundial de Lucha Libre, donde han desfilado muchas estrellas de talla internacional.
Por ahora, el gladiador disfruta de su sueño, ese que le costó mucho con base en esfuerzo, resistencia y mucha paciencia. Pero a partir de su talento le demostró a las empresas que lo rechazaron su valor dentro del cuadrilátero.
En la actualidad, Draego aparece en las segundas y terceras luchas, pero su deseo es escalar hasta posicionarse como un estelar.
En entrevista con MILENIO-La Afición, el gladiador platicó cómo fue su camino para llegar a la cima, esa que comenzó a los 14 años.
"Muchísima dedicación, muchísimo esfuerzo, mucho empeño, llegué siendo un niño a la Arena Coliseo de Guadalajara, con 14 años emigré a la lucha, debuté a los 16. Ha sido un camino muy arduo, lo cual me ha llevado lesiones, golpes; tomé mucho camino en el terreno independiente, ahora que estoy en el Consejo vengo a comerme el mundo, a disfrutar de la etapa que estoy viviendo y ha demostrar por qué Draego puede llegar a ser un estelarista", comentó.
A Draego, como a todos los luchadores, les tocó picar piedra; sin embargo, los rechazos por parte de empresas le hicieron dudar si quería continuar con sus sueños, pero su resiliencia fue más grande.
"Cuando te quitan las oportunidades de las manos que tú sueñas o anhelas y las empresas te dicen: 'no, ahorita no, ahorita no es tu tiempo, ahorita no hay espacio', es cuando te empiezas a desanimar y a agachar la cabeza, pero cuando te enfocas en realmente lo que quieres lograr, si quieres luchar por tus sueños, tienes que buscarlos", agregó.
Luchar por los sueños
Para el enmascarado es importante ir en búsqueda de los sueños y no esperar a que lleguen y mostrar mucha dedicación y esfuerzo día con día.
"Nadie va a llegar a la puerta de tu casa y te van a decir: 'ten, aquí está lo que buscabas', tienes que buscar la manera de poder sobresalir y que dejes tu nombre luchístico en lo más alto; si tú abandonas, vas a decir, ‘¿para qué lo intenté si no lo pude conseguir?' Ahora, si ya lo tienes, pues busca la manera de sobresalir y llevar todo ese tipo de logística a la lucha libre, a tu vida diaria, a tu rutina, vuélvela tu vida, tu familia y, sobre todo, el amor que tú le tengas a este hermoso deporte", manifestó.
Al pertenecer al Consejo Mundial, Draego llega a los camerinos, a esos donde un día soñó estar, en donde soñó luchar, la catedral de la lucha libre: La Arena México.
“Es maravilloso, te juro que cada que me he presentado aquí, los nervios están a flor de piel, se me eriza la piel al saber que voy a salir al ring. No me da miedo, sino un nerviosismo de decir: ‘lo estoy logrando’, porque yo veía videos, luchas, transmisiones y decía: ‘algún día yo quiero estar en ese ring’, y hoy lo estoy cumpliendo”, comentó.
La meta: mantenerse
Draego ya cumplió su primer objetivo, llegar a una de las empresas más importantes, no solo a nivel nacional, también internacional, por lo que la meta para él en estos momentos es mantenerse vigente.
"He triunfado, he batallado, le he sufrido sangre, sudor, lágrimas. Cuando llegas aquí, dices, ‘wow, lo conseguí, luché por llegar aquí’. Ahora no solamente es llegar, sino mantenerse, tener mucha disciplina para escalar peldaños y poder ser un estelarista", apuntó.
RGS