Hoy en día hay muchos entrenadores, coaches, mánagers, promotores deportivos, y descubridores de talentos, pero de dónde salen, cómo se hacen y qué es lo que muchos de ellos buscan; más allá de los aparadores es la gente de esa gran labor callada, muchas veces no tienen un título universitario y otras veces son empíricos del deporte quienes han logrado más que otros que alardean triunfos ajenos.
Allá en el Ejido Sacrificio del municipio de Ciudad Lerdo, a faldas de un cerro radicando en su hogar, el cual levantó junto con su esposo; si la buscan como Gabriela Rubio Caldera no saben quién es, pero preguntas por la señora ‘Lela’ la que le gusta el futbol, todos te dicen su dirección.
Rodeada de sus nietos, bisnietos e hijos, tiene un hogar en el que abunda la vegetación como los helechos, que es su planta favorita, así como jaulas con distintas especies de aves, quienes armonizan con su canto las mañanas y las tardes.
Originaria del Ejido 21 de Marzo y nacida el 24 de marzo de 1953, a sus recién cumplidos 69 años la señora ‘Lela’ recuerda cómo desde niña tuvo siempre la habilidad de hacer lo que quisiera.
“Desde que estaba en la primaria me gustaba el deporte, fui campeona de atletismo en mi escuela, en secundaria estudié en la Federal Uno de Torreón, ahí me fui a competir hasta Saltillo donde también gané, mi mamá me decía que siempre fui muy hábil e inquieta, desde chiquita andaba en el caballo con mi papá y me subía a las bicicletas y me enseñé muy rápido”.
“En la niñez hice atletismo y basquetbol, ahora ya mayor juego cachibol desde 1996, en ese año gané campeonatos y reconocimientos individuales, fui campeona nacional de cachibol hace 8 años en Ciudad de México”.
Un abanico de habilidades
A sus casi 70 años ‘Lela’ aún se mantiene físicamente activa y más allá, atiende su casa. La cocina es parte primordial para la familia, su especialidad es el asado rojo y verde, las tortillas de harina, casi a diario hay que hacer varios guisos y se llena una enorme mesa donde se sientan a degustar casi 20 de sus descendientes.
Actualmente labora en el DIF de Lerdo, ahí da clases de bisutería, tejido, sabe coser y clases de repostería, un verdadero estuche de monerías.
Sus hijos le inculcaron el gusto por el futbol
Hace poco más de 22 años los hijos de ‘Lela’ fueron quienes la orillaron al futbol, frente a su casa hay una cancha en donde los niños juegan.
“Me ponía a jugar con mis hijos y siempre me ponían de portera, de pronto se comenzaron a juntar más niños y veía que cada vez asistían más pequeños a las retas, había chicos muy buenos y a un maestro le comenté que teníamos muchos buenos prospectos y nos los llevamos a torneos a Gómez y Bermejillo, fueron campeones. Eran niños de los ejidos de alrededor”.
Es inquieta
“Todas las mañanas doy clases de manualidades, los lunes me voy a Picardías, los martes ahí en el DIF de Lerdo me la paso con las de la ciudad, miércoles voy a La Loma, aparte también doy masajes, me capacité en Durango”.
Una de sus pasiones
“Me gustaba mucho ver a Enrique Borja, para mí era un jugador muy bueno, de buen carácter y una persona muy noble, eso proyectaba; de años más acá en Santos me gustaba Ramón Ramírez, Benjamín Galindo, un verdadero guerrero como Pedro Muñoz, me gusta aventarme todos los juegos, por cierto que mal juega la Selección Mexicana, es increíble que en un tiro de esquina no levantan la bola, es desesperante ver hoy en día esos jugadores tan mediocres”.
No le gusta la disparidad en ningún rubro
“Veo en el futbol que no existen sueldos y oportunidades iguales para hombre y mujeres, nosotras ya podemos hacer de todo y muchas cosas mejores que los hombres, he tenido la oportunidad de ir a los Estados Unidos, me asombra ver allá mujeres manejando trailers y máquinas de trascabo, es lo mismo en el futbol local, las mujeres del profesional ganan menos que los hombres de una sub 20, eso está mal”.
Los niños del “rancho” son más habilidosos
“Miraba niños pequeños jugar contra niños más grandes, rápido detectaba que tenía cualidades y se iban conmigo a mis equipos Los Potrillos, así muchos niños de Las Piedras, Villa Juárez nos fusionamos con Charly Soccer y ahí los arropan siempre y cuando sean constantes y disciplinados”, concluyó.
aarp