Para los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, la luchadora Jane Valencia se quedó muy cerca de competir en esas ediciones, y ahora, tras apenas regresar a las competencias el año pasado, logró ese boleto en el preolímpico continental de Ottawa, Canadá.
“Para mí es un paso muy importante en mi carrera deportiva y en mi vida, y esto se abre una brecha y un camino que representa para muchas niñas y compañeras de equipo, y que ellas busquen un sueño y hagan su propia historia, que sigan intentándolo y entrenando fuerte, eso para mí me llena mucho de orgullo que una clasificación o un pase”, declaró Valencia.
Para el ciclo de Londres 2012, Valencia aún siendo juvenil participó en el preolímpico continental realizado en Miami, donde se ubicó en el lugar número tres, y poco después compitió en el Preolímpico Mundial en Helsinki, donde se quedó muy lejos de lograr ese objetivo al posicionarse en el sitio 16.
Después vino el ciclo de Río de Janeiro 2016, donde Valencia estuvo buscando en tres ocasiones el tan boleto soñado. En el preolímpico continental en Frisco, Estados Unidos, la jalisciense se ubicó en el séptimo sitio, y después en los clasificatorios mundiales realizados en Ulaan-Baatar, Mongolía, y en Estambul, Turquía, la deportista se quedó en el tercer peldaño.
“En el primer ciclo realmente era juvenil, no le tomé mucha importancia a las competencias, y a pesar de ello fui subcampeona centroamericana en Mayagüez 2010, mientras que en los Juegos Panamericanos de Guadalajara me quedé en séptimo lugar y en el Mundial de ese año me ubiqué en el décimo sitio. Entonces cambió drásticamente mi carácter, ya tomaba las cosas más en serio, me proponía más metas y no las veía inalcanzables y eso es lo que me ha ayudado a tomar las cosas positivas y transformar una situación mala en una favorable”, explicó la luchadora de 30 años de edad.
Después de ese intento fallido para estar en Río 2016, Valencia decidió ponerle una pausa a su carrera deportiva, y en ese tiempo se casó con el luchador puertorriqueño Jaime Espinal, se convirtió en madre, y de paso concluyó con sus estudios de medicina.
El 19 de febrero del 2019, Valencia volvió a la actividad internacional, donde obtuvo el segundo sitio en un torneo realizado en La Habana, Cuba, y después de ese certamen, la luchadora continuó con sus entrenamientos y no fue hasta el Preolímpico Continental de Ottawa donde volvió a aparecer a escena.
En ese evento, Valencia le tuvo que ganar a la campeona mundial, la canadiense Linda Morais.
“La clave para ganar fue principalmente el saber quién soy y hacer lo que sé arriba del colchón, donde ahí no te subes con las medallas o títulos, entonces éramos dos personas que fuimos por el mismo objetivo. Para mí fue un combate más y tenía que superar a mi rival, y que los nervios no me comieran, y al ganar me llené de mucha felicidad y no tengo muchas palabras, mas que estoy muy agradecida con Dios por ponerme en ese lugar y en ese momento”, mencionó.
Este lunes el equipo regresó de Ottawa para continuar con sus entrenamientos en el Centro Nacional de Alto Rendimiento, sin embargo, Jane Valencia se dirigió a Filadelfia, donde radica desde hace unos años y además entrena.